MADRID (AP) — El conservador Partido Popular, que gobierna de forma interina España desde hace seis meses, no logró convencer al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de formar una coalición para superar el bloqueo político que llevó a la inédita repetición de las elecciones generales.
“Nosotros no vamos a apoyar al señor (Mariano) Rajoy para la investidura y tampoco nos vamos a abstener, tiene que ser el señor Rajoy el que busque entre sus afines ideológicos apoyos suficientes para sacar adelante esa investidura”, manifestó el portavoz del comité electoral del PSOE, Antonio Hernando, en una comparecencia ante la prensa agregando que entre ellos “es evidente que no está el PSOE”.
El Partido Popular (PP) ganó con claridad la votación del domingo, aunque sin una mayoría suficiente para gobernar. La formación azul, que gobierna el país desde 2011, obtuvo 137 escaños, 14 más que en diciembre pero lejos de los 176 que le darían la mayoría absoluta en un Congreso de 350 diputados. El PSOE fue la segunda opción más votada con 85 escaños, cinco menos que en diciembre, y registró el peor resultado de su historia.
La legislación española establece que el candidato a presidente debe presentarse a una votación de investidura en la que necesita una mayoría absoluta en la cámara. Si no lo consigue, 48 horas más tarde se celebra una nueva votación en la que bastaría con una mayoría simple, lo que abre la puerta a que la abstención de otros partidos permita el nombramiento del candidato.
Tras la reunión de la dirección del partido el lunes, el presidente en funciones y candidato a la reelección Rajoy confirmó que asumirá la responsabilidad para formar gobierno y se mostró abierto a “hablar con todos” para acabar con el bloqueo ya que la convocatoria a unos terceros comicios sería “algo inaudito e irresponsable”.
“Ofrezco mi mano a los partidos moderados para que hagamos juntos lo que nos están pidiendo los españoles”, manifestó Rajoy sin mencionar directamente a ningún partido. “El Partido Popular sigue dispuesto a dialogar, a hablar y a pactar”.
Haciendo especial hincapié en la “urgencia” de la formación del nievo ejecutivo, Rajoy señaló que los contactos comenzarán tras el consejo de la Unión Europea sobre la salida de Gran Bretaña del bloque de esta semana y la primera llamada será al “PSOE, que es la segunda fuerza política de España”. El objetivo, agregó, es tener gobierno “a finales de julio o principios de agosto… porque los retos que tenemos por delante son importantes”.
La formación socialdemócrata de Pedro Sánchez había anticipado que, como ocurrió en diciembre, no apoyará a Rajoy. Seis meses atrás el aspirante del PSOE intentó sin éxito convertirse en presidente, para lo que tuvo el respaldo de Ciudadanos, uno de los dos partidos nuevos y próximo al sector empresarial, que el domingo consiguió 32 escaños, ocho menos que en la votación anterior.
“El Partido Socialista estará donde nos han puesto los ciudadanos en este momento, que es en la oposición, y tendrá que ser el señor Rajoy el que dé el primer y los subsiguientes pasos”, apuntó Hernando.