DUARTE, República Dominicana.- La jueza del Primer Juzgado de Instrucción del Distrito Judicial de San Francisco de Macorís, Isolina Contreras, dictó auto de apertura a juicio de fondo a Marlon y Marlin Martínez, imputados por el crimen de la adolescente embarazada Emely Peguero, donde deberán probar su inocencia.
Al dar a conocer su fallo en la audiencia preliminar del caso seguido a ambos imputados, la magistrada consideró que existen elementos de prueba suficientes para enviar a Marlon a juicio de fondo donde se decida sobre la acusación en su contra del crimen en contra de Emy del Carmen Peguero (Emely).
La magistrada acogió como buena y válida en cuanto a la forma de la acusación presentada por el Ministerio Público en los tipos penales de tortura y barbarie, asesinato y ocultamiento de cadáver en contra de Marlon Martínez. Hizo lo propio en cuanto a la acusación de complicidad sobre los tipos penales ya citados de la que es imputada la madre de Marlon.
Indicó que su decisión fue tomada según el principio de equidad y que como magistrada juzgó la acusación, no la culpablidad. “Soy juez de la acusación, no de la culpabilidad de los imputados”, enfatizó.
La jueza estimó que existen elementos probatorios suficientes que podrían conducir a una condena en un juicio de fondo.
También consideró que el imputado mostró una actitud de frialdad en torno a la víctima, a quien habría llevado al departamento donde él residía valiéndose de engaño. Asimismo, estimó que éste habría enviado mensajes de texto a una pariente de la joven haciéndose pasar por la menor cuando se presume que ésta ya estaba muerta.
No obstante, “Los muertos sí hablan, y el cuerpo de la occisa sí habló en la autopsia que se le practicó”, sostuvo la magistrada al referirse a los huesos rotos encontrados en el cadáver de la menor embarazada tras el estudio al que fue sometido, especialmente a la rotura craneoencefálica que presenta.
Consideró que el golpe que causó el trauma craneoencefálico se produjo en vida y que no ha sido probada la versión de que una bebida abortiva dada a tomar a la víctima le hubiera causado la muerte.
Asimismo, destacó las evidencias de violencia a la que fue sometido el útero perforado de Emely, que habría sido sometido a algún tipo de presión violenta. Además, resaltó de la perforación del cuello uterino detectado con evidencia de que se le aplicó fuerza.
Indicó que todo esto deberá ser debatido en un juicio de fondo donde el imputado deberá demostrar su inocencia.
Sobre Marlin Martínez, consideró que existen elementos suficientes que se constituyen en indicios de que indujo a su hijo a cometer el crimen en contra de la adolescente, embarazada de éste.
Recordó que, según los elementos periciales ventilados en este proceso, se sabe que la madre de Marlon le dijo “Resuelve eso”, en relación al embarazo de la víctima, quien era la novia de éste y que tenía 16 años de edad y cinco meses de embarazo al momento de su deceso violento.
La jueza Contreras se preguntó cómo se resuelve un embarazo del tiempo que gestaba la novia de Marlon, ahora occisa.
La magistrada destacó que Marlin no estaba de acuerdo con el embarazo y ejerció autoridad y poder sobre Marlon e indujo a su hijo a que resolviera rápido el embarazo de la menor.
No obstante, en un juicio de fondo se debe determinar su implicación en el asesinato de la menor.
Varias veces, mencionó que se deberá aclarar en un juicio de fondo las circunstancias que rodearon al hecho de que la imputada le practicó una prueba de embarazo a la adolescente en un salón de belleza.
Además, la magistrada consideró que la ausencia del objeto contundente con que fue golpeada en la cabeza la víctima no es suficiente para desechar que los imputados sean enviados a juicio de fondo, como pide la defensa.
La rueda de prensa dada por Marlon y Marlin Martínez en la que dijeron “Emely aparece, te estamos esperando con los brazos abiertos” también fue traída a colación por la magistrada, quien recordó que la madre del acusado se refirió a la joven en tiempo verbal pasado al decir que la entonces menor “era” la novia de su hijo.
Ambos imputados deberán seguir bajo prisión preventiva por entender la jueza que no han variado los presupuestos que motivaron esa medida de coerción.
Asimismo, la jueza resolvió la devolución de la camioneta marca Toyota Hilux a Oscar Antonio Nico Reyes, quien demostró ser el propietario de la misma, pero indicó que éste deberá presentarla cada vez que se le requiera en este proceso judicial.
La magistrada también acogió los escritos de defensa de los imputados, que deberán ser considerados en el juicio de fondo.
Esta funcionaria judicial dijo que coincidía con la abogada de Marlin Martínez, Ingrid Hidalgo, en que este caso debe motivar a la sociedad dominicana a profunda reflexión sobre los valores humanos, la falta de tolerancia para no dañar a los demás y el odio.
Agregó que este martes, con su decisión, se desapodera de este proceso, que ha cumplido con las leyes y que su trabajo “está ahí”.
“Soy una mujer temerosa de Dios”, enfatizó al destacar que a sus hijos quiere dar valores morales y que de su trabajo no tiene que hablar.
Habla la abogada de Marlin
Concluida la audiencia, la abogada de Marlin Martínez, Ingrid Hidalgo, la emprendió contra la decisión de la jueza y la acusó de “populismo penal”. Indicó que a la jueza de Instrucción sólo le faltó condenar a los imputados a 20 y 30 años de cárcel.
Cuestionó cómo era posible que se considerara complicidad “darle un consejo a un hijo mayor de edad”. “Ahora yo tengo miedo de hablar con mis hijos”, exclamó la defensora de Marlin Martínez.