A través de Twitter, Kim Kardashian indicó que las llamas golpearon su mansión valorada en USD 60 millones en Hidden Hills, en Calabasas, pero que habían sido contenidas por los expertos.
De acuerdo a TMZ, la pareja contrató a una patrulla privada de bomberos para que protegieran su imponente propiedad, que quedaba dentro de la zona de evacuación.
El equipo contaba con mangueras, pero también con máquinas excavadoras que ayudaron a crear una barrera para que el fuego no se expandiera por dicha zona. Al final, el matrimonio logró salvar su residencia. Y, además, ayudaron sus vecinos.