Joaquín El Chapo Guzmán atraviesa los días más difíciles de su vida. Esos que nunca imaginó cuando estaba en lo más alto de su imperio del mal. Esos que ni en sueños se le cruzaron cuando era el hombre más poderoso de México y el Lord de la Droga en todo el mundo.
Pero ahora, en una corte de los Estados Unidos ve cómo ese poder no le sirve de nada. A tal punto que a diario los jurados encargados de condenarlo o no, escuchan las masacres que el Cártel de Sinaloa -que El Chapo comandaba- asombrándose por la brutalidad del líder narco.
Sus sicarios asesinaron, secuestraron, torturaron e interrogaron no solo a rivales, sino a cualquiera que la organización criminal creyera que podría ser una amenaza para su negocio. Un negocio tan grande que el fiscal norteamericano Adam Fels debió emplear una metáfora impactante para dar una idea de la magnitud del comercio ilegal que comandaba Guzmán.
Fels explicó al jurado que durante sus años de liderazgo del Cártel de Sinaloa, El Chapo -hoy de 61 años- envió la suficiente cocaína al país que lo juzga como para proveer a cada norteamericano de una “línea“. “Más de una línea de cocaína para cada persona de los Estados Unidos“, dijo Fels en la audiencia, de acuerdo con el diario inglés The Sun.
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“Dinero, drogas, asesinatos y una vasta organización global de narcotráfico: de eso se trata este caso, y eso es lo que demostrará la evidencia en este caso“, añadió Fels ante un atento jurado.
Otra comparación podría servir para dar una dimensión real de cuánta cocaína traficó El Chapo a los Estados Unidos. Si tomamos en cuenta que una línea de este estupefaciente tiene una extensión promedio de 10 centímetros (medida arbitraria) y la población total de ese país es de 325 millones de habitantes… en total suman unos ¡32.570 kilómetros! Esa distancia es la que cubre el vuelo más largo del mundo, Nueva York-Singapur, ida y vuelta.
Durante la jornada, uno de los abogados de Guzmán, Jeffrey Lichtman, dijo que en realidad su cliente “no controlaba nada” de la red narcotraficante y que en verdad era un “chivo expiatorio“. Culpó en cambio a otro capo de las drogas: Ismael El Mayo Zambada. No conforme con eso, el letrado dijo que ese narco sobornaba al Gobierno de México.
El Chapo fue extraditado a los Estados Unidos el 19 de febrero de 2017. Fue trasladado a una cárcel de máxima seguridad luego de que burlara a las autoridades mexicanas en reiteradas veces. El capo narco había sido capturado por tercera vez en Los Mochis, Sinaloa, el 8 de enero de 2016. Guzmán se había fugado la noche del 11 de julio de 2015 a través de un túnel de 1,5 km que dejó en ridículo al gobierno de Enrique Peña Nieto.
