La muerte del coronel Daniel Ramos Alvarez se trató de un complot que involucra a los dos agentes que los acompañaban y a otros narcotraficantes de Baní, provincia Peravia.
La revelación fue hecha por Jesús Peña, quien se identificó como hermano de Rafael Antonio Díaz, conocido como Buche, quien está preso por la muerte del coronel Ramos Alvarez.
Peño explicó que la muerte fue una trama era eliminar al oficial y de pasó destruir el punto de drogas por ser el más codiciado, “el mejor”.
Sin el más mínimo tapujo dijo que la droga se vende libremente en Baní y que existe una competencia entre operadores del microtráfico para atraer clientes.
“El punto de mi hermano, es el mejor aquí, en Baní, en el momento, entonces los otros hicieron su complot para desaparecerlo…para que maten al coronel en el punto, para involucrar a mi hermano”, afirmó.
Sus declaraciones concuerdan con las acusaciones del senador Wilton Guerrero de que en Baní operan 40 puntos de drogas, cada uno de los cuales pagan peaje a la Policía, la Dirección Nacional de Control de Drogas y al Ministerio Público.