La sequía está causando estragos en la agricultura, la ganadería, agua para el consumo humano y los pronósticos es que de prolongarse, sus efectos se traducirán en escasez, carestía y baja producción de alimentos.
Erick Rivero, presidente de la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios (CONFENAGRO) y de la Asociación Nacional de Productores de Leche (APROLECHE), pidió al Gobierno declarar la Línea Noroeste en estado de emergencia por la sequía.
Rivero informó que más de dos mil cabezas vacas han muerto por falta de agua y de pastos, lo que ha provocado una considerable reducción en la producción de leche y carne.
Mientras que Ángel Hernández, presidente de la Cooperativa Agropecuaria del Cibao, afirmó que la Línea Noroeste se encuentra en estado crítico, especialmente el arroz, guineo y plátano.
Indicó que la producción de arroz en La Vega está reducida en alrededor de un 25% y que podría incrementarse en un 30 a 35% si continúa la sequía.
Propuso que las autoridades desvíen agua del embalse del Alto Yuna hacia la presa de Rincón, a los fines de garantizar el regadío necesario para salvar las cosechas.
“Ahora el arroz comienza a parir y si no hay agua, todo se perderá”, afirmó
CAASD CONTRA LAVADORES. El director de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo, Alejandro Montás, limitará las actividades de los carwash y los lavadores de autos informales.
Montás dio que los lavadores de autos formales se les permitirá laborar dos días por semanas, mientras serán suspendidos los lavadores informales.
Montás dijo que estas medidas se unen a otras como la racionalización del servicio en sectores que van desde cortar el suministro de siete a cuatro días, hasta un mínimo de dos días.
En sectores populares del Gran Santo Domingo abundan los lavadores informales de autos.
Fácilmente se pueden ubicar cinco o más lavadores en un segmento de calle de 500 metros.