La oposición de Nicaragua demandó este lunes al Ejecutivo la libertad de al menos 86 “presos políticos” en las próximas 36 horas, como parte de los compromisos adquiridos por el Gobierno en la mesa de negociaciones para superar la crisis local, que ha dejado cientos de muertos en 14 meses.
“Todos ellos tienen que salir en las próximas 36 horas, antes de la medianoche del día 18, ese es el compromiso que tiene el régimen actual y el que la sociedad nicaragüense le exige”, dijo esta tarde el exdiplomático y miembro de la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, Carlos Tünnermann, en conferencia de prensa.
El llamado lo hizo la Alianza Cívica en conjunto con el Comité Pro Liberación de Presas y Presos Políticos, ante el temor de que el Gobierno del presidente Daniel Ortega repita su patrón a lo largo de las negociaciones, de no cumplir, o cumplir a medias, con los compromisos firmados.
De acuerdo con lo establecido entre las partes a fines de marzo pasado, el Gobierno del presidente Daniel Ortega daría “libertad definitiva” a todos los presos políticos en un plazo máximo de 90 días, que vence mañana 18 de junio.
Tünnermann resaltó que la “liberación definitiva” significa el cierre de las acusaciones legales contra los “presos políticos”, quienes han sido acusados de terrorismo y otros delitos.
Según la Alianza Cívica, tras liberar a 620 “presos políticos”, al menos 86 permanecen en los calabozos de Nicaragua, luego de haber sido arrestados por participar en protestas contra Ortega.
La oposición considera innecesario que decenas de convictos permanezcan bajo encierro, en especial cuando algunos de ellos no tienen acusaciones legales en su contra.
“Soy madre de Francisco Jiménez, exijo su libertad, me baso en los acuerdos firmados, y exijo por los que faltan por liberar. No es justo que todavía no los quieran poner libres”, dijo Leslie Rayo, integrante del Comité.
La semana pasada el Gobierno liberó a 106 “presos políticos”, incluyendo a campesinos, estudiantiles y comerciantes, que lideraron las protestas contra Ortega en 2018.
Nicaragua atraviesa una crisis sociopolítica que ha dejado cientos de detenidos, muertos y desaparecidos, así como decenas de miles en el exilio, desde el estallido social contra Ortega el 18 de abril de 2018.
Al menos 325 personas han muerto en el marco de la crisis, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que responsabiliza al Gobierno de Ortega por la violencia. Organismos humanitarios locales suman 594 víctimas, y las autoridades reconocen 199.