Después del escandaloso lanzamiento de Leaving Neverland, un nuevo proyecto cinematográfico amenza con seguir manchando la reputación del incónico rey del pop.
Se trata de “Killing Michael Jackson”, un documental que recoge los testimonios de los tres policías que entraron por primera vez al dormitorio en el que falleció del cantante.
Antes de que la televisión británica diera a conocer el primer capítulo, algunas imágenes del dormitorio en el que pasaba sus noches el legendario cantante y bailarín, ya se habían filtrado en la red: medicamentos, agujas, poemas pegados en las paredes y una muñeca de asepcto siniestro fueron algunos de los objetos hallados por los oficiales.
Los detectives que interrumpieron en la intimidad de la fallecida estrella, Orlando Martínez, Dan Myers y Scott Smith; describieron la habitación como un lugar “caótico” y y asestado de medicamentos.
La producción se estrena faltando dos días para que se cumpla el décimo aniversario de la muerte de Jackson, quien falleció por una intoxicación aguda de propofol, un poderoso anestésico utilizado en hospitales y usado por la estrella como somnífero.
Jackson murió el 25 de junio de 2009 por una intoxicación aguda de propofol y benzodiazpina en su propia casa de North Carolwood Drive, en Holmy Hills.
Conrad Murray, su médico personal, fue quien lo encontró sin respiración y con un puslo débil.
Esta sustancia “no tiene nada que hacer en una casa, excepto que esté equipada con una sala de operaciones”, dijo a la agencia AFP el profesor François Chast, director de Farmacología en el hospital parisino Hotel-Dieu, poco después de la muerte del cantante.
Conrad Murray, por su parte, cumplió dos años de prisión por homicidio involuntario.
“Leaving Neverland”
El documental Leaving Neverland, producido por HBO, pone los ojos del mundo sobre la vida de Michael Jackson y una oscura historia de la que se habló durante años y por la que el artista fue llevado a juicio. Pero que recién con esta serie dirigida por Dan Reed la sociedad parece haber tomado conciencia real sobre quién fue el ídolo pop.
El documental consta de dos capítulos, de dos horas cada uno, y es realmente perturbador de ver, ya que aborda de una manera descarnada a Jackson como un pedófilo.
Con el testimonio de Wade Robson y James Safechuck, quienes relatan durante esas cuatro horas los abusos que sufrieron en su niñez y cómo sus familias quedaron atrapadas dentro de la maquinaria de magia y dinero que Michael Jackson tenía.
Los dos protagonistas de este documental tenían entre diez y siete años cuando conocieron a Jackson y en poco tiempo empezaron a ser abusados sexualmente por el cantante. La historia recorre ese período de tiempo y llega hasta la actualidad, con estos dos hombres, hoy mayores de treinta años, sufriendo las consecuencias de lo que ellos cuentan haber vivido.
Que el responsable de estos actos sea una celebridad no le da inmunidad; al contrario, le da el doble de responsabilidad, ya que con sus actos destruyó la vida de varios chicos y también destrozó el alma de millones de fanáticos alrededor del mundo, a los cuales les explotó una bomba en el living de su casa, en forma de documental llamado Leaving Neverland.