El banco estatal brasileño Caixa Económica Federal pidió a la Justicia que decrete la bancarrota del grupo Odebrecht, envuelto en un escándalo de corrupción internacional y que este año solicitó acogerse a la ley de quiebras para reestructurar su millonaria deuda, según confirmaron este jueves fuentes próximas a la negociación.
La Justicia ya aceptó en junio pasado la solicitud de la llamada “recuperación judicial” de Odebrecht y le dio un plazo de 60 días para presentar un plan a los acreedores, algunos de los cuales, como Caixa Económica, lo han rechazado de plano.
La corrupción en Odebrecht no se limitó a Brasil y se expandió por otra decena de países de Latinoamérica y África, dónde se investigan pagos de sobornos a políticos por parte de la constructora.
Odebrecht ha firmado acuerdos, que incluyen el pago de multas, con los gobiernos de Estados Unidos, Brasil, Perú, Panamá, República Dominicana, Guatemala, Ecuador y Suiza para compensar los actos ilícitos por los que se le investiga y trabaja con otros países para cerrar pactos similares.