Santo Domingo, EFE.- El gobernador del Banco Central de la República Dominicana, Héctor Valdez Albizu, informó hoy de que en el mes de septiembre la actividad económica real registró un crecimiento interanual de 5.1 %, luego de haber alcanzado un 4.8 % en el mes de agosto.
De esta forma, durante los primeros nueve meses del año el producto interno bruto (PIB) alcanzó un crecimiento interanual de 4.8 %, el más alto de América Latina y el Caribe.
Según el informe del ente emisor, las actividades de mayor incidencia durante los primeros nueve meses del año fueron los servicios financieros (8.8 %), construcción (8.5 %), energía y agua (7.9 %), otras actividades de servicios (6.9 %), transporte (5.2 %), actividades inmobiliarias (5.0 %) y agropecuaria (4.2 %).
En cuanto a la actividad hotelera, bares y restaurantes, Albizu destacó que a pesar de “las dificultades por las que ha atravesado el turismo, como resultado de una campaña mediática negativa en medios internacionales”, dicho sector registró un crecimiento interanual positivo de 1.0 % en el período de enero-septiembre.
En ese mismo tenor, el Banco Central informó que el país recibió cerca de 5 millones de visitantes entre enero y septiembre, lo que significó ingresos por 5,767.2 millones de dólares en el período, con una disminución de 0.8 % con respecto al año anterior, lo que fue compensando por las remesas, que presentaron un crecimiento interanual de 8.8 %.
Albizu informó además sobre “el efecto positivo que han tenido las medidas monetarias expansivas”, logrando dinamizar el crédito privado en moneda nacional, el cual se ha incrementado en 55,586.8 millones de pesos de junio a la fecha.
En términos interanuales, el crédito al sector privado en moneda nacional ha crecido en torno al 11.0 %.
Albizu se refirió también a la estabilidad de precios, reflejada en una inflación acumulada al mes de septiembre de 2.38 %, mientras que la inflación interanual se situó en 2.02 %, manteniéndose por debajo del límite inferior del rango meta de 4.0 %, con una horquilla de variación del 1.0 %, establecido en el Programa Monetario.
“La estabilidad de precios se ha mantenido a pesar de que la sequía que ha afectado al país provocó una mayor inflación de alimentos, la cual fue compensada parcialmente por la caída interanual de precios en los sectores de transporte y viviendas”, señaló el gobernador.
En cuanto al tipo de cambio, indicó que la depreciación acumulada se mantuvo por debajo del promedio de América Latina, alcanzando 4.9 % a pesar de los efectos que sobre el mercado cambiario han tenido el escenario internacional adverso y la convulsión política nacional.
“Los que me conocen saben que tengo un compromiso innegociable con la estabilidad cambiaria y que estas situaciones que se han presentado, producto de la incertidumbre política como señalé anteriormente, serán enfrentadas y resueltas de manera contundente”.
En adición se informó de que, desde el pasado lunes 21 de octubre de 2019, los bancos múltiples se encuentran transando sus operaciones dentro de la Plataforma Electrónica de Divisas, dando inicio a la primera etapa del proceso de modernización del mercado cambiario en un ambiente electrónico, de mayor eficiencia y transparencia.
En cuanto al mercado laboral, las últimas cifras disponibles de la Encuesta Nacional Continua de Fuerza de Trabajo reflejan que en los siete años transcurridos desde octubre de 2012 a junio 2019 se han acumulado 831,725 empleos adicionales.
La tasa global de participación (cantidad de personas en edad de trabajar que se encuentra ocupada), se ubicó en 65.2 % en abril-junio de 2019.
Según Albizu, el crecimiento económico ha afectado positivamente indicadores sociales como la pobreza y la desigualdad: la pobreza monetaria bajó en un 16.9 % del 2012 al cierre de 2018, lo que significa que aproximadamente un millón y medio de dominicanos lograron superar el umbral de la pobreza en seis años.
La proporción de pobreza extrema o indigencia descendió de 9.9 % a 2.9 % durante ese mismo período, unos seiscientos cincuenta mil indigentes menos, lo que representa un logro extraordinario.
El déficit de cuenta corriente para el período enero-septiembre fue de apenas 587.6 millones de dólares y la inversión extranjera directa ascendió a unos 2,040 millones de dólares.
Al 18 de octubre, las reservas internacionales ascendieron a 7,668.6 millones de dólares, equivalentes a 4.2 meses de importaciones de bienes y servicios, excluyendo las zonas francas.
“Un logro indiscutible es que el país ha fortalecido su posición de reservas internacionales sin poner en riesgo la estabilidad relativa del tipo de cambio”, concluyó Albizu.EFE