Barcelona .- El Barcelona cedió un empate (0-0) contra el Slavia de Praga, en un choque sin muchas luces para los azulgrana, que volvieron a cuajar un partido de bajo nivel, en la línea de los últimos.
Discreta puesta en escena del Barcelona en el primer periodo, que pronto debió corregir el dibujo sobre el campo, debido a que el Slavia tiró la defensa a más de treinta metros desde su portería, y en ocasiones la llegó a plantar en el centro del campo, sin que el Barcelona ofreciese respuestas para atacarla.
Así, Messi se quedó en punta, con De Jong, Griezmann y Vidal por detrás, aunque la inactividad e improductividad del argentino le llevó en más de una ocasiones a alienarse con los centrales en la creación para recibir al pie e iniciar alguna jugada.
Tuvo bien maniatado el Slavia al Barcelona, que en el 11 rompió por primera vez la defensa con un pase en profundidad de Piqué a Semedo, para que encarase por la banda. De hecho, el portugués gozó de más de una oportunidad con el balón en profundidad, pero sin resultado, a excepción de un último que intentó hacia Arturo Vidal, que un defensa cortó. En otro, arrancó una falta que Messi la ejecutó con respuesta del meta Kólar con los puños para sacar el balón.
El Slavia tuvo una buena opción en el minuto 14, cuando Piqué se enredó con el balón en la banda y Peter Olayinka se lo robó. El delantero encaró hacia Ter Stegen hasta que Piqué lo placó por detrás, cometiendo falta y viendo amarilla, lo que le impedirá jugar el siguiente partido (Barcelona-Borussia Dortmund).
La primera triangulación exitosa del Barcelona llegó en el 26, en una acción de Griezmann con Jordi Alba, y balón final para Messi, quien de ‘chilena’ intentó un disparo acrobático que se perdió por alto.
En la siguiente, respondió el Slavia, en la mejora oportunidad para los checos, cuando Stanciu chutó a placer, pero el balón, que iba entre los tres palos, lo rechazó la espalda de su compañero Frydrych.
Por parte azulgrana, la oportunidad más clara llegó de la botas de Messi, que tras una finta a un rival en el centro del campo encaró en solitario y, a pesar de tener a Griezmann como opción clara de pase, se la jugó él con un disparo al larguero.
En el tramo final del primer acto, el Barcelona propició tres saques de esquina consecutivos, en el momento de más agobio que tuvo la meta checa, con disparo de Messi y cabezazo de Piqué para batir a un Ondrej Kólar que estuvo muy certero en las dos acciones.
Sergi Roberto ingresó en el segundo acto tras acabar Jordi Alba lesionado. El técnico azulgrana, Ernesto Valverde, cambió a los laterales de banda y dejó al catalán para frenar al mejor del Slavia, Peter Olayinka, después de que Semedo tuviese muchos problemas en el primer tiempo.
A pesar de no tener el partido controlado y que al Slavia le costaba bastante poco armar un ataque triangulando con cierta facilidad, fue el Barcelona el que gozó de las mejores oportunidades en estos primeros minutos, con un disparo raso de Sergi Roberto, tras un gran pase de Griezmann, que Kólar desbarató echándose al suelo, y en un gol anulado a Vidal, por un fuera de juego de Messi muy ajustado.
Valverde sacó del campo a Dembélé, tras una actuación poco lucida, que tuvo una respuesta del público en forma de recriminación al francés, y sacó a Ansu Fati, que se colocó en la banda derecha. También sacó a Rakitic en lugar de Busquets.
Los dos cambios afectaron muy poco en la mejora del juego de los culés, completamente fuera del partido y con un Messi que se conectó en pocas ocasiones, aunque en una de ellas, en el 78, cuando Ansu Fati le tiró una diagonal al centro del área, el argentino tocó levemente y, una vez más, Kólar desbarató una clara acción del gol.