Las dolorosas consecuencias de ser un fanático de los eSport

Dolor de cuello y muñeca, fatiga visual y malestar en el cuello son algunos de los problemas que puede experimentar los jugadores de eSports cuando no realizan esta actividad de manera adecuada. Como en toda actividad, es importante tomar precauciones para cuidar la salud.

Pasar varias horas sentado, mirando una pantalla y moviendo de un lado al otro un mouse puede ser dañino para la salud. Esto no es novedad ni exclusivo del mundo de los videojuegos: el trabajo sedentario de oficina y la adicción al celular (que entre otras cosas también se ha convertido en una oficina móvil) también causan estragos en el cuerpo.

El punto es que en el último tiempo, el mundo de los eSports (la participación en juegos competitivos) ha ido cobrando mayor presencia y por eso ahora los médicos creen necesario alertar sobre los cuidados que también hay que tener en cuenta en esta disciplina para evitar daños en la salud.

Un informe publicado en la revista de la Asociación Americana de Osteopatía, analizó los inconvenientes de salud que suelen experimentar los jugadores de eSports universitarios.

Fatiga visual

Más del 25% de los jugadores de eSports practican más de 5 horas por día. Durante esta actividad, los jugadores fijan sus ojos en la pantalla de una computadora por largos períodos de tiempo, sin parpadear. Esta posición sostenida a lo largo de las horas puede generar visión borrosa, dolor lumbar y dolor de cabeza.

Un punto interesante es que esta condición, tal como se menciona allí, afecta al 90% de las personas que usan una computadora durante más de 3 horas por día. Como se sabe, no son sólo los gamers los que están expuestos a este tipo de situación: la mayoría de las personas hoy en día pasan muchas más horas frente a un monitor, ya sea porque están escribiendo, editando un video o consumiendo contenido de cualquier tipo.

“La falta de contraste y definición en las imágenes de computadora generadas por píxeles aumenta la tensión en el ojo. En consecuencia, los movimientos sacádicos, la acomodación y la convergencia aumentan mientras que la tasa de parpadeo disminuye, lo que fatiga el sistema oculomotor”, se detalla en el informe.

Para evitar estos inconvenientes, los especialistas sugieren que el monitor esté entre 12 y 15 centímetros por debajo de la línea de visión recta y a una distancia de entre 50 y 71 centímetros.

Además, es conveniente regular la iluminación del lugar y enseñarles a los jugadores ejercicios para reducir la fatiga visual.

Cerca del 35% de los jugadores estudiados sienten dolor en el cuello o la espalda mientras juegan. La investigación que examinó la postura mientras jugaban reveló que dentro de los 30 minutos de juego, había un desplazamiento hacia adelante de la cabeza en comparación con la columna vertebral.

“Cada centímetro de desplazamiento de la cabeza hacia adelante se asocia con un aumento de 10 libras (4,5 kilos) de fuerza de torsión en los extensores cervicales. El aumento de la fuerza perpetúa un ciclo de desplazamiento de la cabeza hacia adelante y tensión muscular”, se subraya en el texto.

Esto deriva en dolores de cabeza y de espalda. A su vez, esa presión extra en los discos intervertebrales puede derivar en hernias, de acuerdo con los expertos. Por otra parte, se analiza que los asientos que se suelen usar, con grandes respaldos promueven la lordosis lumbar, así que contrario a lo que se cree no son beneficiosos a nivel postural.

Los especialistas sugieren estiramientos así como ejercicios de fortalecimiento y osteopatía para contrarrestar estos inconvenientes.

La idea es fortalecer los músculos de la espalda, el abdomen y el cuello que son clave a nivel postural.

Más del 30% de los jugadores de eSportes tienen dolor en la mano o la muñecas. Ocurre que jugar requiere movimientos rápidos y repetitivos de muñecas, manos y dedos. Esto puede generar hipertrofia de los tendones flexores en el túnel carpiano.

El síndrome del túnel carpiano es una presión excesiva sobre el nervio mediano, lo cual puede generar debilidad, hormigueo y daño muscular en los dedos de la mano y la muñeca. Este trastorno está asociado con el uso excesivo del mouse, celulares y otros dispositivos que impliquen ese movimiento repetitivo.

Aquí también se sugiere cuidar la postura, hacer osteopatía, tomar descansos y realizar ejercicios para prevenir daños.

De acuerdo con el informe, los jugadores entrenan entre 3 y 10 horas por día. “Se encontró un efecto negativo en la salud vascular periférica y central cuando los individuos permanecieron sentados durante más de 3 horas. En 2012, un jugador profesional de eSports tuvo una trombosis venosa profunda, y el tratamiento se retrasó porque no sabía que el dolor en las piernas podría indicar una afección potencialmente mortal. Los datos de la encuesta también han demostrado que más del 40% de los atletas de deportes electrónicos no participan en ningún tipo de actividad física, lo cual indica una alta prevalencia de trastorno por déficit de ejercicio en esta población”.

Cabe señalar que se describe el trastorno por déficit de ejercicio como una condición que se ven en jóvenes que realizan menos de 60 minutos de actividad física por día. El sedentarismo es un mal que afecta a la población en general, más allá de los gamers. La Organización Mundial de la Salud dice que al menos un 60% de la población mundial no realiza la actividad física necesaria para obtener beneficios para la salud. De ahí que el sedentarismo sea considerado un problema de salud público global.

Los especialistas sugieren realizar actividad física de manera regular. “Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades sugieren entre 7000 y 10.000 pasos diarios y 150 minutos de actividad aeróbica de intensidad moderada por semana” se detalla en el artículo.

La pantalla emite una luz blanca azulada que retrasa el pico de melatonina previo a dormirse, lo cual afecta el descanso y si se reitera a lo largo del tiempo ocasiona insomnio que deriva en fatiga, cambios de humor y aumento de peso.

El informe sugiere que se limite la exposición a la luz azulada que emiten las pantallas antes de dormir. Esta recomendación vale para los displays en general: computadoras, tablets y celulares.

El trastorno por videojuegos se caracteriza por una adicción persistente o repetida a los juegos online u offline, según lo define la Organización Mundial de la Salud. Para hablar de adicción a los videojuegos se tienen que dar estas cuestiones: incapacidad de la persona de controlar la frecuencia, duración e intensidad de las sesiones de juego; que los juegos pasan a tener prioridad sobre otros intereses de la vida diaria y que la conducta se mantenga a pesar de que tengan consecuencias negativas para la persona.

En el informe se menciona que cerca de 5 millones de personas en Estados Unidos sufren este trastorno de todos modos, se advierte que “existe una controversia importante con respecto a la validez y la definición operativa de este diagnóstico en la comunidad psicológica”.

De hecho, la Asociación Estadounidense de Psiquiatría (APA, por sus siglas en inglés) disiente con la caracterización que hace la OMS porque no creen que la adicción se vincule a los juegos en sí, sino que se produce como una consecuencia de otros trastornos como la ansiedad y depresión.

Fuente: Infobae