Bruno Mars solicitó que la demanda en su contra, presentada por la promotora Major Entertainment, sea desestimada, por lo que podría librarse de pagar $1 millón de dólares, según informó The Blast.
La demanda fue presentada a principios de año, y en ella se acusaba al intérprete y una publicista llamada Michelle D. Reece de cancelar un concierto, por lo que solicitaron un millón de dólares para reparar los daños.
En su respuesta, el cantante señala que nunca tuvo contacto alguno con la publicista y que nunca hubo un contrato vinculante.
“El propio demandante reconoce que Reece nunca tuvo contacto con Mars y sus representantes autorizados”, señala el documento presentado por el equipo legal del Mars.
La estrella espera que la demanda en su contra sea desestimada, y por el momento se desconoce si la publicista responderá a la querella.
Fuente: La Opinión