La sinusitis se produce cuando los senos paranasales (espacios dentro de la nariz que pasan por la frente y las mejillas) se hinchan o inflaman, haciendo que la nariz se congestione y que el moco no drene de manera normal.
Cuando se sufre de sinusitis, también llamada rinosinusitis, respirar por la nariz es una tarea difícil, y el área que rodea los ojos muchas veces produce dolor o sensibilidad.
Causas
- Pólipos nasales. Crecimiento de tejidos que obstruyen los senos paranasales o los conductos nasales.
- Asma.
- Tabique desviado. Su torcedura puede obstruir los conductos nasales.
- Otras enfermedades. Como el VIH o la fibrosis quística.
- Infecciones en las vías respiratorias.
- Alergias. Como la fiebre del heno, que puede bloquear los senos paranasales.
- Exposición regular al humo del tabaco.
Complicaciones
Según la Clínica Mayo, si no se trata la sinusitis a tiempo, o alcanza a ser crónica y se presta poca atención, estas podrían ser las graves complicaciones:
- Infecciones. Desarrollo de inflamación en las membranas y el líquido que rodea el cerebro y la médula espinal, produciendo meningitis.
- Problemas de visión. La sinusitis se puede propagar a la cuenca del ojo, causando fallas en la visión; o en peor caso, ceguera permanente.
La sinusitis puede ser una afección grave, causante de dolores de oído y hasta en los dientes, cuando se encuentra en su estado crónico. Incluso podrías sufrir de mal aliento y fatiga constante.
Lo mejor es consultar al médico si se presentan estos síntomas, antes que el malestar sea peor y los tratamientos ameriten mayor intensidad.
Si eres una persona alérgica, mantén el control de ella a través de medicamentos recetados por un especialista médico. Y evita el uso del cigarrillo, o estar cerca de personas que fuman. Esto también es un fuerte desencadenante.
Fuente: La Opinión
