La desmotivación sigue siendo un problema que afecta al individuo en varias facetas de su vida. Y es también una situación en la cual todos hemos estado alguna vez, indiferentemente de a que nos dediquemos.
Hoy examinaremos brevemente la desmotivación, atendiendo en particular las causas que la originan y también ciertos tipos de ella.
Causas de la desmotivación
Según Psicología y Mente, la desmotivación puede deberse a causas reales y causas mentales. Las causas reales estarían vinculadas con dificultades que la persona encuentra al momento de perseguir y cumplir los objetivos propuestos, obstáculos que conducen a la desmotivación.
Entornos económicos poco favorables pueden estimular la desmotivación de la persona, así como situaciones familiares complicadas.
La desmotivación puede surgir también del agente en lugar del entorno, fenómeno que tendría la procrastinación como consecuencia.
La procrastinación es la tendencia a postergar tareas importantes por hallarlas difíciles o simplemente por una indisposición mental del individuo.
En esta indisposición mental están incluidas causas motivadas por trastornos depresivos.
Tipos de desmotivación
La desmotivación no se presenta de una única forma, y puede expresarse en varios signos que no siempre están normalmente relacionados con ella.
Si la causa es un trastorno depresivo, el individuo puede expresar signos extremos de desmotivación, lo que se conoce como abulia, que generalmente aparece con fuentes de desmotivación como la anhedonia.
Desmotivación académica
La desmotivación académica se caracteriza por la dificultad del estudiante para atender el entorno académico y los deberes asociados a él. Esto puede deberse a contenido poco atractivo, profesores poco estimulantes, dificultades de los deberes y asignaciones, entre otros factores más específicos.
Desmotivación laboral
En este caso, la desmotivación afecta tanto a la persona como a la organización donde trabaja. Cambios en el régimen laboral, incentivos y ascensos pueden solucionar esto, aunque de vez en cuando la desmotivación se debe a que la persona simplemente quiere cambiar de aires.
En la desmotivación hay un peso importante de la psicología, por lo que no siempre los cambios concretos pueden cambiar la situación. Si te sientes desmotivado de manera continua, hablar con un psicólogo puede ser la solución.
Fuente: La Opinión
