Las plataformas de observación del rascacielos más alto del mundo, el Burj Khalifa, se han puesto a la venta, informa la agencia Reuters. El mayor desarrollador del emirato de Dubái (Emiratos Árabes Unidos) podría recaudar de esta manera 1.000 millones de dólares en medio de una recesión inmobiliaria.
Los miradores del emblemático edificio de 828 metros (dos veces más alto que el Empire State Building de Nueva York) son un destino turístico muy popular. Pueden generar entre 163 y 191 millones de dólares de ingresos al año, según una fuente bancaria de la agencia. La empresa vendedora, Emaar Properties, mantiene la privacidad en torno al posible acuerdo.
RT