Kaylen Ward, modelo de 20 años de edad, ha impulsado la iniciativa de enviar fotografías de su cuerpo desnudo a toda persona que se anime a donar por los incendios que sacuden Australia. Una idea iniciada por redes sociales y la cual ha logrado recaudar más de 700.000 dólares en tan sólo dos días.
Kaylen publicó en su perfil de Twitter la campaña con el propósito de ayudar a combatir los incendios y, sin duda alguna, tuvo una rápida aceptación.
“Estoy enviando desnudos a cada persona que done, por lo menos, 10 dólares a cualquiera de estos eventos de recaudación de fondos para los incendios forestales en Australia”, escribió la joven en un tuit. “10 dólares donados equivalen a una fotografía de un desnudo mío en tu DM. Debes enviarme la confirmación de la donación”, agregó.
El domingo por la tarde ya había juntado, según otra de sus publicaciones, medio millón de dólares. Al día siguiente avisó que esa cifra se había elevado a 700.000. Una locura.
En su mensaje inicial, Ward, que ya gana dinero con la venta de desnudos en el mercado de adultos Only Fans, publicó una lista de enlaces donde la gente podía hacer donaciones. Especificó que los usuarios debían enviar una captura de pantalla de su donación para recibir la fotografía deseada.
“Estaba viendo todos los mensajes en Twitter sobre los incendios en Australia y me preocupaba mucho que no hubiera mucha cobertura de los medios y, en consecuencia, poca gente donando”, dijo a BuzzFeed News.
En la entrevista, además, reveló que tuvo que reclutar a cuatro personas para ayudarla a clasificar las donaciones y verificarlas.
El tuit inicial ha llegado ya unas 3.400 respuestas, más de 70.000 retuits y unos 164.000 likes. Todo y el éxito a través de Twitter, Ward, inicialmente, se animó a hacer los envíos a través de Instagram. Sin embargo, dadas las políticas de seguridad de esta red social, su cuenta fue cancelada.
No han sido pocas las críticas que la modelo ha recibido. Ella, ha querido defenderse apelando a la necesidad de actuación y el respeto. “A cualquiera que tenga algo negativo que decir sobre la forma en que estoy recaudando dinero, le preguntaría qué ha hecho para ayudar y si tiene una solución alternativa que resulte ser igual o más efectiva. No creo que las personas o los animales se quejen de donde viene el dinero”.
”Soy una chica de 20 años. Soy una persona. Piensa en cómo me afecta la mierda que haces. Ahora piensa en millones de personas haciéndome esas cosas a la vez. Déjame en paz”, tuiteó la joven. “Da miedo exponer tu cuerpo de esta forma a tantísima gente desconocida, pero es lo que tenía que hacer”, termina.
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