La suspensión de las elecciones municipales implica la pérdida de miles de millones de pesos para el Estado, y un duro golpe económico y la quiebra de muchos candidatos a alcaldes, regidores, directores distritales y vocales.
Alrededor de cinco mil millones de pesos fue el presupuesto destinado por la Junta Central Electoral para este proceso malogrado.
La convocatoria de elecciones extraordinario implicaría la erogación de una suma de dinero similar a esta cifra, lo que las autoridades tendrán que buscar o recurrir a préstamo debido a que no está contemplado en el presupuesto del 2020.
La parte más pesada la llevan los candidatos, pues agotaron todo sus recursos y muchos tuvieron que recurrir a préstamos.
Para que se tenga una idea, una candidatura a la alcaldía del Distrito Nacional distribuyó para el día de las elecciones más de 75 millones de pesos, para la logística de movilizar votantes a las urnas.
JCE suspende elecciones municipales por primera vez en la historia
Los candidatos a regidores en el Distrito Nacional superan un centenar y se calcula que invirtieron alrededor de cuatro a cinco millones por cabeza.
Una candidatura de un pueblo pequeño como Guaymate, un candidato a síndico con posibilidades de triunfo, el gasto supera los nueve millones de pesos.
Cada situación varía conforme a la cantidad de electores de cada municipio, pero en todo caso, los gastos son millonarios.
Ahora, ante la convocatoria de elecciones extraordinarias, cada candidato tendrá que recurrir a sumas millonarias para financiar la campaña publicitaria y la logística electoral.
La ley establece un plazo no mayor de 30 días para elecciones extraordinaria, pues la Constitución establece la separación de las elecciones municipales de las presidenciales y congresionales.