El presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Julio César Castaños Guzmán, anunció este jueves que todas las boletas que se utilizarían en las suspendidas elecciones municipales del domingo pasado se incinerarán y se imprimirán las que servirán para los comicios del 15 de marzo.
Castaños así lo informó al término de una maratoniana reunión sostenida con los delegados de los partidos políticos reconocidos por esa institución.
“Se incinerarán todas las boletas, habrá boletas nuevas. Fíjense que las boletas actuales tienen fecha del 16 de febrero, por lo tanto no sirven para nada”, dijo.
El funcionario reiteró que habrá una “investigación exhaustiva” sobre lo ocurrido el domingo, cuando la JCE dispuso la suspensión de las elecciones tras el fallo masivo del sistema de voto automatizado con el que se votaba en 18 de los 158 municipios del país. En el resto de las demarcaciones se ejercía el sufragio de manera manual.
“Habrá sanciones ejemplares para los responsables”, agregó Castaños, quien reconoció que el “daño” causado, por la suspensión de las elecciones, “tiene que ser reparado”.
Castaños Guzmán advirtió a los delegados de los partidos, que para que las elecciones del 15 de marzo se produzcan sin mayores problemas, es necesario realizar reuniones periódicas fijas “con presencia de todo el mundo”.
También dejó sobre la mesa la posibilidad de extender el horario de votación para los comicios venideros, al tomar en cuenta que los ciudadanos votarán solo de manera manual.
“El día que anunciamos la suspensión de las elecciones, fue un día de tristeza infinita para nosotros (…) la tristeza infinita puede matar a cualquiera”, aseveró el presidente de la Junta.
Al inicio del encuentro, Castaños dijo que ni él ni los demás miembros del pleno de la JCE tenían pensado renunciar y que la única manera de salir de sus cargos era a través de un juicio político. EFE