Desde la explosión de los precios de los geles desinfectantes hasta ladrones que se hacen pasar por voluntarios de la Cruz Roja o la OMS, la epidemia del nuevo coronavirus se ha convertido en un lucrativo negocio para los delincuentes.
De hecho, la Organización Mundial de la Salud ha alertado de la proliferación de fraudes aprovechando el miedo a la propagación del nuevo coronavirus originado en China y ha lanzado una serie de recomendaciones al respecto.
En primer lugar cita el riesgo por suplantación de la propia OMS para pedir dinero o información privada. “Si una persona u organización se pone en contacto asegurando que es la OMS, verifica su autenticidad antes de responder”, apunta la organización.
Es que la OMS nunca te pedirá un registro para ver información de seguridad, nunca remitirá adjuntos por correo electrónico que no hayas solicitado, nunca te redirigirá a un enlace fuera de la web www.who.int, nunca cobrará por un empleo, pedirá registro para una conferencia o reservar hotel, nunca realiza sorteos, ofrece premios ni certificados por correo electrónico.
La OMS nunca pedirá donaciones directas para respuestas de emergencias. “Cuidado con los criminales que utilizan correo electrónico, sitios web, llamadas telefónicas, mensajes de texto e incluso faxes para sus timos”, ha subrayado.
Asimismo alerta del ‘phishing’, correos electrónicos maliciosos con suplantación de identidad de la OMS. “La OMS está al tanto de que existen mensajes que intentan aprovechar la emergencia del nuevo coronavirus” en los que piden información sensible o contienen un enlace o un adjunto malicioso.
Incluso si se ha proporcionado ya información sensible no hay que caer en el pánico. “Si cree que ha dado datos suficientes tales como nombres de usuario o contraseñas a los cibercriminales, cambie de inmediato su acceso en todos los sitios en los que los haya empleado”, explica la OMS. “Si ve un timo, informe. Si ve un timo, díganoslo”, concluye.
En Italia, por ejemplo, surgió otro fenómeno: ladrones que se hacen pasar como si fueran voluntarios de la Cruz Roja, miembros de los servicios de salud o de Protección Civil, que realizan pruebas en las casas para verificar una eventual contaminación. Su objetivo: mientras uno realiza el supuesto análisis, otro roba dinero o joyas.
La Cruz Roja y Protección Civil han informado que no realizan ninguna operación puerta a puerta, instando a los italianos que sean “prudentes” y que alerten a la policía en caso de tales visitas.
También están quienes ofrecen “curas milagrosas”. “Algunos productos homeopáticos o naturales son ofrecidos por Internet, argumentando que pueden prevenir infecciones o curar el coronavirus”, señaló a la AFP Pier Luigi Lopalco, profesor de Higiene y Medicina Preventiva de la universidad de Pisa. “Estos productos no tienen ninguna eficacia clínica”, y quienes los ofrecen son claramente “charlatanes”, advierte el científico.
Un maná caído del cielo para delincuentes italianos
Desde fines de la semana pasada, la península ha registrado un aumento espectacular de casos de coronavirus, convirtiéndose así en el país de Europa más afectado por el brote. Frente a la epidemia, los italianos se lanzaron a comprar máscaras protectoras y geles desinfectantes, lo que provocó una gran escasez en farmacias y supermercados del norte del país.
Los ladrones y listillos intentaron rápidamente hacer su negocio y sacar provecho de la situación.
Este martes de mañana, un internauta ofrecía una botella de un litro de la solución antibacteriana “Amuchina” por ¡300 euros! en el sitio de venta en línea Ebay. Por un desinfectante para bebés, Neo baby, hay que pagar no menos de 240.
El fenómeno es tal que desencadenó bromas y fotos humorísticas en las redes sociales: “Intercambio Amuchina 5 litros por Audi R5S 2019. También acepto Audi RS5 de 2016, más 65,000 euros”, o esta transacción imaginada entre un distribuidor de drogas y un comprador, P: “¿Qué quieres: hachís o cocaína?”. R: “Gel Amuchina”.
Pero la subida “a niveles astronómicos” de los precios de estos productos higiénico-sanitarios, en cambio no hace reír a las asociaciones de defensa del consumidor, como CODACONS.
Además de la Amuchina (650% más por la botella que es vendida a 22,50 euros en lugar de a 3 euros, por lo general), CODACONS informó de un salto del 1.700% del precio de las máscaras, que ahora se comercializan en línea a 1,80 euros, contra 10 céntimos antes de la “psicosis” colectiva. Incluso menciona un lote de cinco máscaras con válvula presentadas en Amazon como “ideales para el coronavirus”, por 189 euros.
“Se trata de una especulación vergonzosa con el objetivo de sacar provecho del miedo de la gente”, destaca CODACONS, que presentó una denuncia ante la Fiscalía de Roma y a la policía financiera, solicitando el cierre de las webs incriminadas. “Si los gigantes del comercio en línea no retiran de maner automática las páginas donde se hacen estas especulaciones, son cómplices de estafa”, advierte.
“Estamos evaluando la hipótesis de adoptar normas para contener los precios de desinfectantes y máscaras para impedir aumentos injustificados”, anunció este martes la viceministra de Economía, Laura Castelli.
Fuente: Infobae