El presidente de la Sociedad Dominicana de Pediatría, Marcos Díaz Guillén, ha alertado de la posibilidad de que el cierre de los centros de vacunación y la consiguiente dificultad para vacunar a los niños, como consecuencia de la emergencia por COVID-19 provoque una nueva crisis de salud pública.
El doctor Díaz Guillén advirtió que un descuido en la vacunación infanfil posibilita que enfermedades como la difteria, tétanos, tosferina, hemophilus influenzae, neumococo, influenza, rotavirus, sarampión, paperas, hepatitis A y B, varicela y otras vuelvan a aparecer.
De acuerdo con lo anterior, la Sociedad Dominicana de Pediatría solicita al Ministerio de Salud Pública y al Servicio Nacional de Salud, que manejan los centros de vacunación públicos, y a los centros de vacunación privados, que al menos los niños lactantes por debajo de los dieciocho meses de edad sigan recibiendo las vacunas del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) durante el tiempo que se mantenga el estado de emergencia nacional.
Igualmente, puntualizó el doctor Díaz Guillén que esa entidad ha solicitado que se ponga en marcha la desinfección de todos los centros de vacunación y se implemente un programa para que los niños menores de un año y medio puedan recibir esta valiosa prevención de enfermedades, implementándose a la vez una logística segura para el personal sanitario y las madres que soliciten este importante servicio.