Una noche cualquiera de este tiempo especial, en un recorrido por los retenes y puestos de supervisión montados por miembros de las Fuerzas Armadas y la Policía, un supervisor encontró que los soldados y policías tenían cena fresca recién elaborada que no la servía la institución. El hallazgo se repitió una, dos… Y despertó interés.
El ángel que la distribuía tenía nombre y apellido. Juana Hernández, una persona que pese a su discapacidad y limitado recursos encontraba entusiasmo y utilizaba su limitada fuerza física para elaborar una cena que cada noche distribuía a los responsables de la seguridad en la zona.
El llamado a distanciamiento social a causa del COVID-19, al consejo a quedarse en casa y cuidarse, principalmente para las personas de más edad, no fue obstáculo para que Juana, una madre soltera, dedicara tiempo para ofrecer cena fresca elaborada por ella y llevarla todas las noches a militares y policías de servicio en los retenes ubicados en diferentes vías de Santo Domingo.
El comportamiento de ese ángel solidario, desconocido, causó comentarios, elogios y sorpresa, pero anoche la sorprendida fue ella ya que con motivo de celebrarse este domingo el Día de las Madres, el Ministro de Defensa, Teniente General Rubén Darío Paulino Sem, ERD, hizo un alto para llevarle a Juana un ramo de rosas rojas y reconocer el apoyo que ofrece cada noche a los encargados de cuidar a los ciudadanos, a pesar de sus limitaciones.
Juana fue sorprendida en su hogar mientras empacaba los alimentos que distribuiría noche, viernes 29 de mayo. La inesperada visita para este simbólico agasajo fue coordinada por el ministro Paulino Sem, acompañando del director general de la Policía Nacional Mayor General Ney Aldrín Bautista Almonte y la directora del Plan Social de la Presidencia Licenciada Iris Guaba.
Los visitantes, además de palabras de agradecimiento, junto con las rosas le entregaron alimentos, lavadora, estufa, nevera, televisor, juego de cama, licuadora, plancha, juego de colchas y sábanas, olla de presión, entre otros enceres del hogar.
Aferrada a su ramo de rosas, Juana, una delgada mujer, mostraba su sorpresa y llorando de emoción dijo: “realmente yo me siento muy feliz porque cuando empecé a hacer esto no fue esperando recibir ningún beneficio y le doy las gracias a mi Dios que fue quien me mando a hacer esta labor, y voy a seguir haciéndolo porque mi mayor regalo es poder seguir ayudando”.
Los lugareños de Los Farallones de Cristo Rey se hicieron notar con una extendida tanda de aplausos, para mostrar su apoyo a la iniciativa de reconocer a esta solidaria madre que desde la segunda semana de la cuarentena prepara alimentos para militares, policías e indigentes, contando con donaciones y el apoyo de sus vecinos Carlos Almánzar, Gabriel Gómez y Anyobi Arias.
Anoche La “Rubia”, como le conocen en el barrio, hizo una vez más su recorrido, pero esta vez en acompañada de Paulino Sem, Bautista Almonte y la señora Guaba. En la parada de la esquina que forman las avenidas Máximo Gómez con 27 de febrero el ministro Paulino Sem, sorprendió de nuevo a Juana Hernández, entregándole la Medalla al Mérito.