Apple se está preparando para anunciar este mes un cambio en el uso de procesadores en computadores Mac a partir del próximo año, según informó Bloomberg.
Las nuevas Mac incorporarán los mismos semiconductores desarrollados por la misma compañía, con base en la tecnología de arquitectura de chips de ARM, que se utilizan en los iPhone. Este anuncio se haría en el marco del evento anual para desarrolladores que se llevará a cabo, de forma virtual, el 22 de junio.
Según el periodista Mark Gurman, Apple planea que toda su línea de productos Mac pase a usar sus propios chips debido a que ofrecen mayor rendimiento y eficiencia energética.
La decisión perjudicaría a Intel, considerando que las Mac actualmente representan un 12% del mercado de PC de Estados Unidos, según los últimos datos de Gartner. Por otra parte, se estima que la línea de computadoras portátiles de Apple representa entre 2% y 4% de las ventas de Intel y un porcentaje de sus ganancias mayor.
Apple también podrá aprovechar la tecnología de fabricación de chips de Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC) en el futuro. La empresa de la manzana mordida utiliza la fábrica con sede en Taiwán para fabricar sus diseños de chips. En los últimos años, TSMC ha superado a Intel en su capacidad de fabricación de chips más avanzados.
A primera vista, las pérdidas financieras para Intel parecen manejables. Sin embargo, hay otros efectos secundario que pueden tener mayor impacto. Primero, si Apple logra fabricar chips de mejor rendimiento y más eficientes a nivel energético, tal como lo hace dentro del mercado de smartphones, entonces los Mac basadas en chips ARM podrían obtener una mayor participación en el mercado de las computadoras. Más allá de esto, la medida de Apple podría representar una seria amenaza para el negocio de chips de servidores de Intel.
Actualmente, Intel domina el negocio de centros de datos de alto margen de beneficio, donde vende chips de servidor a proveedores y corporaciones de computación en la nube. El segmento generó ventas por USD 23.500 millones para Intel en 2019, con una ganancia operativa de USD 10.200 millones. Según IDC, el fabricante de chips tenía 93% del mercado mundial de procesadores de servidores en función de las ventas del año pasado, frente a la participación de 5% de Advanced Micro Devices Inc.
Si bien Intel ha logrado mantener su sólida posición de mercado en el mundo de los servidores, la llegada de los Mac basados en Arm podría cambiar el panorama. Linus Torvalds, el creador de Linux, ha dicho durante mucho tiempo que la razón principal por la que los chips Arm han tenido dificultades para ganar tracción en el mundo de los servidores era porque no había plataformas masivas de PC basadas en Arm.
Citó la importancia de que los desarrolladores puedan iterar y probar su código de servidor en máquinas locales. Si bien se lanzaron computadoras portátiles con Windows basados en ARM en el mercado, en general no se han vendido bien. Ahora, con el cambio de Mac a chips basados en ARM, los desarrolladores tendrán decenas de millones de máquinas basadas en ARM a su alcance, lo cual ofrece un ecosistema próspero para la próxima arquitectura de chips.
De todos modos, llevará un cierto tiempo que la medida de Apple afecte el mercado. Intel actualmente disfruta de una fuerte demanda, teniendo en cuenta que muchos usuarios se ven obligados a comprar más hardware para equipar sus oficinas de trabajo remoto. Además de hay una creciente demanda de computación en la nube para sus chips por el aumento en el uso de servicios de internet en la era de covid-19.
Pero en los próximos años, los negocios clave de Intel se verán amenazados por la medida de Apple. El paso es importante y probablemente será un punto de inflexión para la industria de chips.
Infobae (Bloomberg)