Este martes se decidirán elecciones en tres estados de Estados Unidos, con la mayor atención sobre una primaria demócrata en el estado de Kentucky para determinar quién retará en noviembre al líder de la mayoría del Senado, y una dura primaria demócrata para retar al legislador Eliot Engel, de Nueva York.
En Kentucky, la ex piloto de combate de la Marina, Amy McGrath, parece en camino a una precandidatura demócrata para enfrentarse a McConnell, habiendo recaudado 41 millones de dólares para su campaña y logrando asegurar el respaldo de figuras demócratas clave para intentar derrotar al legislador, que ya lleva seis períodos, y que con frecuencia les complica la agenda legislativa a los demócratas.
Pero ahora McGrath, de 45 años, quien en el 2018 perdió por un escaso margen en una contienda por un escaño en la Cámara de Representantes, de pronto se ha encontrado en una contienda demasiado apretada para pronósticos para la elección primaria demócrata contra Charles Booker, un legislador de 35 años que ha logrado recibir el apoyo de varios periódicos relevantes del estado y de demócratas progresistas no muy a gusto con la centrista McGrath.
Booker, un afroamericano, ha recaudado menos de 4 millones de dólares en fondos de campaña, pero ha logrado conectarse con votantes disgustados con el trato de policías hacia ciudadanos de la raza negra.
Mientras la atención nacional se ha enfocado en la muerte el 25 de mayo de George Floyd, quien estaba bajo custodia policial en Minneapolis, Minnesota, desatando protestas de costa a costa durante el último mes, la atención en Kentucky ha estado centrada desde marzo en la muerte a tiros a manos de un policía de Breonna Taylor, una afroestadounidense de 26 años quien era técnico de emergencias médicas.
Taylor murió baleada por la policía en la ciudad más grande de Kentucky, Louisville, mientras se ejecutaba por error una búsqueda de drogas en su apartamento. La policía, que tenía la dirección equivocada, mató a Taylor y no encontró ninguna droga.
En una parada durante su campaña, Booker dijo a los votantes: “Estoy recorriendo Kentucky hablando sobre el racismo estructural y viendo a personas, algunos 99 por ciento blancos, alzando sus puños al aire porque saben que no podemos permitir que pase este momento”.
El líder demócrata en el Senado, Charles Schumer, dio su respaldo desde muy temprano en la contienda a McGrath, la expiloto, pero más recientemente, figuras progresistas como los senadores Bernie Sanders o Eliabeth Warren se han inclinado por Booker, dejando en duda los resultados del martes.
Quien gane, sin embargo, tendrá una dura batalla contra McConnell, de 78 años, una institución en Kentucky y en las estructuras de poder de Washington. McConnell ha sido un decidido partidario de las propuestas legislativas del presidente Donald Trump y de sus nominaciones de jueces conservadores. Más aún, el presidente es popular en Kentucky, un estado que ganó con una ventaja de casi 30 puntos porcentuales en 2016.
En la otra contienda del martes, Engel, de 73 años, y presidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, enfrenta el reto de otro candidato afroamericano, Jamaal Bowman, de 44 años, y un director de escuela primaria que nunca antes había aspirado a un cargo electo.
Al igual que Booker en Kentucky, Bowman está ofreciendo una Plataforma de políticas más izquierdistas que Engel, con la esperanza de derrotar al congresista que ha cumplido 16 períodos. Engel tiene el respaldo de figuras clave de Washington, incluyendo a Schumer, a la presidente de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi, y a la ex secretaria de Estado Hillary Clinton, que perdió las elecciones presidenciales del 2016, contra Trump.
Pero los progresistas de Nueva York se han alineado junto a Bowman, incluyendo a la congresista, Alexandria Ocasio-Cortez, quien obtuvo una sorpresiva victoria en el 2018 contra un congresista bien atrincherado en su escaño.
Más al norte, en el estado de Nueva York, en un distrito sólidamente republicano, el demócrata Nate McMurray y el republicano Chris Jacobs, se miden para terminar el último semestre del período de dos años que quedó vacante cuando el republicano Chris Collins renunció tras declararse culpable de prácticas ilegales en la Bolsa de Valores. Independientemente de quién gane, McMurray y Jacobs muy probablemente se enfrentarán de nuevo en noviembre para medirse por un nuevo período completo de dos años en la Cámara de Representantes.
En Virginia también habrá varias elecciones primarias para escaños en la Cámara de Representantes y una primaria republicana para escoger a quién retará al senador demócrata Mark Warner, en las elecciones de noviembre.
Fuente: VOA
