Kimora Lynum, una niña de 9 años, murió el 18 de julio en el condado de Putnam, según los registros del Departamento de Salud de Florida, que confirmó que es la víctima de COVID-19 más joven del estado.
Una representante de la familia comentó que cuando empezó la fiebre, Kimora fue llevada al hospital, pero la enviaron de vuelta a casa, donde la niña colapsó poco tiempo después.
Los padres de Kimora no saben dónde ni cómo su hija pudo contraer el coronavirus, ya que la niña estuvo en casa todo el verano y no estuvo en contacto con personas infectadas. Mary García, funcionaria de Salud del condado, también confirmó a la CNN, que por lo que sabe, la niña no tenía ningún problema crónico de salud.
Fuente: RT