El Vaticano confirmó este jueves con una nota oficial la renovación del histórico acuerdo con China firmado hace dos años sobre el nombramiento de obispos, calificando de “positiva” su aplicación al poner fin a casi 70 años de tensiones sobre la cuestión.
“Tras expirar la vigencia del Acuerdo Provisional entre la Santa Sede y la República Popular China sobre el nombramiento de obispos(…) las dos partes acordaron extender la fase de implementación experimental del acuerdo por otros dos años”, reza la nota.
En el breve comunicado, la Santa Sede subraya que la aplicación del acuerdo “ha sido positiva gracias a la buena comunicación y colaboración entre las partes en la materia acordada”.
En la nota, el Vaticano anuncia que “pretende continuar el diálogo abierto y constructivo para promover la vida de la Iglesia católica y el bien del pueblo chino”.
Una respuesta indirecta a las críticas de Estados Unidos, que había pedido el mes pasado la ruptura del pacto y transformado el caso en un delicado asunto diplomático durante la visita al Vaticano del secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo.
El jefe de la diplomacia estadounidense había lamentado antes de su visita las “horribles” persecuciones de creyentes de todas las religiones en el gigante asiático y pidió al papa “coraje” para combatirlas.
El comunicado del Vaticano va acompañado por un largo artículo del diario L’Osservatore Romano, en el que se explican las razones de esa decisión.
El objetivo principal del acuerdo “es apoyar y promover la proclamación del Evangelio” en China “reconstituyendo la unidad plena y visible de la Iglesia”, sostiene el diario.
El acuerdo, fuertemente deseado por el papa Francisco para reunificar una Iglesia china dividida en dos (la oficial y la clandestina), le brinda la última palabra para designar a los obispos chinos, y desde entonces dos prelados han sido nominados.
Fuente: AFP