Sao Paulo, EFE.- El presidente de la filial brasileña del Banco Santander, Sergio Rial, afirmó este martes que ve a Brasil “en un ritmo de retomada del crecimiento”, que espera que se mantenga con señales “concretas” de compromiso fiscal por parte de los poderes Ejecutivo y Legislativo.
“Brasil realizó acciones importantes para minimizar el impacto de la covid-19 tanto en las esferas de políticas públicas sanitarias, como en la esfera financiera”, dijo el directivo en una rueda de prensa para comentar los resultados trimestrales de la entidad.
Según Rial, algunos indicadores macroeconómicos de septiembre y octubre ya muestran esa tendencia positiva de la mayor economía suramericana, que según las últimas previsiones del mercado financiero se hundirá este año un 4,81 %, frente a otras proyecciones de meses atrás que situaban el batacazo entre el 8 % y el 9 %.
No obstante, matizó que esa recuperación depende en parte de que las autoridades brasileñas refuercen que “hay claramente un deseo de convergencia fiscal”.
Brasil atraviesa una grave crisis fiscal que se ha visto agravada con las ambiciosas medidas económicas adoptadas para lidiar con los efectos de la pandemia del nuevo coronavirus, que ya deja en Brasil cerca de 160.000 muertes y 5,5 millones de contagios.
El déficit público nominal alcanzó entre enero y agosto el equivalente al 16,70 % del Producto Interno Bruto (PIB) brasileño, en comparación con el 5,89 % del mismo periodo de 2019, mientras que la deuda bruta se ha disparado hasta el 88,8 % del PIB.
En este sentido, Rial consideró que esas señales positivas de convergencia fiscal, que se materializarían en el respeto al techo de gastos y al impulso de las reformas económicas pendientes, entre ellas una administrativa, asentará la trayectoria de crecimiento de Brasil.
Y además permitirá “ver inversiones más importantes” en el país, en áreas como infraestructura, apuntó.
“Pero depende mucho de esas señales, todos nosotros esperamos esas señales” de compromiso fiscal porque, de lo contrario, “generaría una gran incertidumbre al mercado”, indicó Rial.
Por otro lado, manifestó que el Santander Brasil no aumentará las provisiones extraordinarias más allá de los 3.200 millones de reales (563 millones de dólares) que reservaron en el segundo trimestre para lidiar con los efectos de la pandemia.
“No veo razones, con un PIB creciendo (en 2021), para que haya un deterioro en los niveles de morosidad”, aseguró.
“Si tenemos ese escenario macro mejor, con crecimiento, infraestructura retomando, construcción civil, que ya retomó, la cuestión del desempleo comenzará estructuralmente a bajar”, completó.
