El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, concluyó este viernes en Vietnam una gira asiática en la que buscó contrarrestar la influencia China en la región. El viaje también lo llevó por India, Sri Lanka, Maldivas e Indonesia.
En Hanoi, Pompeo se reunió con su homólogo vietnamita, Pham Binh Minh, para abordar un acuerdo que busca estrechar los lazos económicos de ambas naciones. Además, debatieron acerca de las disputas con Beijing en el río Mekong y en el mar de China Meridional.
“Un placer reunirme con el viceprimer ministro y ministro de Exteriores Pham Binh Minh hoy en Hanoi para discutir el compromiso de EE.UU. por un Indo-Pacífico libre y abierto”, escribió en Twitter el funcionario estadounidense.
Pompeo celebró los 25 años de relaciones diplomáticas entre ambos países, que fueron enemigos acérrimos durante dos décadas tras la Guerra de Vietnam, pero que acercaron posiciones después de la caída de la Unión Soviética y el aumento del poder comercial y militar de Beijing.
Pompeo condenó en reiteradas ocasiones la expansión de Beijing en el mar de China Meridional, donde mantiene disputas soberanistas con Vietnam, así como con Taiwán, Filipinas, Malasia, Brunéi e Indonesia.
El jefe de la diplomacia estadounidense comenzó su gira el pasado lunes en India, donde impulsó su alianza militar a través de un acuerdo de intercambio de datos por satélite que permitirá a Nueva Delhi ganar más precisión en el manejo de sus misiles o drones.
El acuerdo se firmó en medio del aumento de las tensiones entre India y China, consecuencia de sucesivos enfrentamientos a mediados de este año en el Himalaya, donde ambas naciones mantienen una disputa territorial desde la década de 1960.
Durante su intervención, Pompeo se refirió a la veintena de soldados indios que murieron en el marco de esos enfrentamientos. El funcionarios les rindió tributo en el memorial en la capital india dedicado a los caídos en combate, al tiempo que aseguró que apoyarán “a la India mientras se enfrenta a las amenazas contra su soberanía y libertad”.
En Sri Lanka y Maldivas, Pompeo calificó a Pekín como “depredador”, al tiempo que abogó por un Indo-Pacífico “libre y abierto” lejos de la influencia china.