(EFE).- La Asamblea General de la ONU extendió este lunes el mandato del italiano Filippo Grandi como alto comisionado para los Refugiados durante un nuevo periodo de dos años y medio.
La Asamblea, el órgano en el que se sientan los 193 Estados miembros de Naciones Unidas, dio luz verde a la continuidad de Grandi después de una recomendación del secretario general de la organización, António Guterres.
En un comunicado, el responsable de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) agradeció la decisión y aseguró que es un reconocimiento del trabajo del personal de la agencia.
Grandi asumió este puesto en 2016, con un mandato de cinco años que vencía el próximo 31 de diciembre y que ahora se prorrogará dos años y medio más.
Según Naciones Unidas, la extensión por ese periodo y no por el habitual de cinco años responde a motivos personales.
El italiano de 63 años sucedió precisamente al actual jefe de la ONU, pues Guterres fue alto comisionado para los Refugiados entre 2005 y 2015.
Antes, Grandi había sido titular de la oficina de la ONU de asistencia a los refugiados palestinos, conocida por sus siglas UNRWA, desde 2010 hasta 2014, y había trabajado con la agencia de Naciones Unidas para los refugiasdos (ACNUR) y organizaciones no gubernamentales en Afganistán, Sudán, Siria, Turquía o Irak.
ACNUR se estableció en 1950 con el mandato de coordinar la acción internacional para la protección de los refugiados y ha sido distinguida en dos ocasiones con el premio Nobel de la Paz, en 1954 y en 1981.
La agencia cuenta con más de 17.000 empleados y trabaja en 135 países para apoyar a refugiados y desplazados en todo tipo de ámbitos.
Según cifras de la ONU, a finales de 2019 había en el mundo al menos 79,5 millones de personas desplazadas, entre ellas 26 millones de refugiados fuera de sus países, de los que aproximadamente la mitad eran menores de 18 años.