EFE, Argentina,- El último adiós a Diego Maradona será en la Casa Rosada. Fuentes oficiales confirmaron ayer que el velatorio, abierto al público, se hará en el hall de ingreso de Balcarce 50, a partir de las 6 de este jueves y hasta las 16. El Gobierno trabaja con la hipótesis de una ceremonia masiva: espera a un millón de personas para despedir al astro del fútbol. La familia, sin embargo, pidió que sea una ceremonia corta.
Varios ministerios trabajan coordinando el operativo en la particular coyuntura de la pandemia. El Gobierno involucró en el evento a los ministerios de Seguridad, Defensa y Salud. Se espera que se fijen postas sanitarias y cordones de seguridad para ordenar a la multitud. La idea oficial es que la gente acceda a la plaza a través de Avenida de Mayo y que ingrese a la sede de gobierno por la entrada de Balcarce 50, para despedirse en la capilla ardiente que se montará en el primer salón del edificio. Luego todos circularán y se retirarán por Balcarce 25.
“Estoy organizando todo para que no haya aglomeración de gente y que se permanezca el menor tiempo posible en el lugar cerrado”, dijo Fernández en radio Metro, en la cuarta entrevista que dio en el día. Muy pocas figuras fueron despedidas masivamente en la sede del Gobierno: la última vez, hace diez años, fue con Néstor Kirchner.
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La noticia de la muerte modificó toda la agenda en la Caa de Gobierno. El primer contacto con el entorno del jugador lo hizo el subsecretario de la Presidencia, Miguel Cuberos, que conoce a la familia desde hace tiempo. La llamó a Claudia Villafañe y le dijo que el Presidente estaba “a disposición” de la familia y que le ofrecía “todas las posibilidades” para despedirlo, inclusive la Casa Rosada. “Será donde quiera la familia”, enfatizaron en el entorno del Presidente.
A la espera de una respuesta del círculo íntimo de Maradona, se comenzaron a registrar los primeros movimientos en la puerta principal de la Casa Rosada. La orden fue desarmar los andamios y obradores que había en la entrada de Balcarce 50, que se habían montado para hacer refacciones en el lugar. Una decena de obreros dejaron en pocos minutos el espacio totalmente despejado. También se acercaron al edificio miembros de la productora La Corte, encargada de transmitir muchos de los actos oficiales.
Finalmente, Fernández volvió a hablar con Villafañe, que aceptó el ofrecimiento del Presidente.Según señalaron fuentes al tanto de las tratativas, se espera que primero la familia despida a Maradona en la Rosada en una ceremonia íntima, para luego abrir las puertas al público. El Gobierno estaba en una encrucijada, porque entorno del jugador quiere que la ceremonia sea corta.
Un salón estará reservado solo para familiares e invitados especiales.