Los dolores musculares se desarrollan como consecuencia de una serie de factores que van desde el estrés, el insomnio, la ansiedad, los problemas a nivel circulatorio o incluso articulares. Por eso han surgido todo tipo de terapias que buscan solucionar estos padecimientos, como los masajes con piedras calientes.
Se pueden entender como un tratamiento que combina el masaje terapéutico común con la aplicación sobre la piel de piedras en distintas temperaturas elevadas. Esto ayudaría a que fluya la energía vital y se alivien trastornos físicos y emocionales. Aquí conocerás toda la información relacionada a ellos.
¿En qué consiste el masaje con piedras calientes?
El nombre oficial de este método es terapia geotermal y está enfocado en la aplicación de piedras en el cuerpo. Estas son calentadas previamente y colocadas sobre la piel con el objetivo de aliviar tensión en los músculos para la reparación de tejidos blandos dañados o incluso para mejorar las energías.
Cabe destacar que las piedras empleadas para esta terapia son especiales. Suelen estar hechas de basalto, que es un tipo de roca volcánica cuya forma se caracteriza por ser plana y suave. Este material es calentado a una temperatura comprendida entre los 130 y 145 grados centígrados.
Se aplican en zonas específicas del cuerpo, tales como la columna, el pecho, el estómago, el rostro, las palmas de las manos y los pies. Con respecto a la técnica empleada, dependerá del profesional que esté realizando la labor. Algunos masajistas suelen sostener las piedras en sus manos para luego colocarlas sobre las personas. Asimismo, se pueden combinar masajes suecos, vibraciones o movimientos circulares.
¿Cuáles son los beneficios de los masajes con piedras calientes?
Esta práctica se popularizó por sus efectos relajantes para el cuerpo, además de sus propiedades en cuanto a la renovación de las energías. Sin embargo, hay otra serie de beneficios que se obtienen. ¡Te los explicamos en detalle!
1. Alivian el dolor muscular
Este es el beneficio más popular que tienen los masajes con piedras calientes. El calor es el aliado perfecto para aliviar dolores musculares y tensiones en el cuerpo.
Esto se debe a que permite incrementar el flujo sanguíneo en el área afectada, lo que ayuda en la reducción de los espasmos musculares. Aparte de eso, disminuye la inflamación que se pueda presentar en los músculos.
2. Reducen los niveles de estrés y ansiedad
El estrés y la ansiedad representan una problemática que cada vez más personas sufren como consecuencia del estilo de vida ajetreado. Esto hace que las preocupaciones o inconvenientes de la vida cotidiana se transformen en pequeñas cargas de energía negativa.
Sin embargo, dentro de los múltiples tratamientos que existen para ello las prácticas con piedras calientes son eficaces para atacar y reducir los niveles de estrés. Gracias a los masajes, la energía fluye y se consigue armonía entre cuerpo, mente y espíritu.
3. Aportan mayor flexibilidad articular
Cuando una persona desarrolla padecimientos en las articulaciones, se desencadenan otra serie de dolores generalizados que resultan muy molestos. Por eso, cuando se identifican limitaciones, como dificultad para moverse, una de las primeras soluciones que se plantean son los masajes.
Aquellos que se ejecutan con piedras calientes suelen ser la mejor opción, ya que este tipo de terapias son ideales para relajar los músculos y reducir inflamaciones.
4. Mejoran la calidad del sueño
Distintos factores como el estrés, la ansiedad e incluso los dolores en el cuerpo suelen acarrear otros padecimientos vinculadas a la dificultad para descansar. En este sentido, es importante resaltar la necesidad de un descanso efectivo para poder trabajar de forma óptima durante el día.
Los masajes con piedras calientes son útiles para promover la relajación general del cuerpo, lo que hace posible conseguir un sueño más profundo y de mejor calidad.
5. Poseen efectos estéticos
Finalmente, no se pueden pasar por alto los beneficios de estos tratamientos para la piel. A través de la mejoría que se produce en la circulación sanguínea y la eliminación de toxinas se contribuye a que la piel tenga un aspecto mucho más terso y saludable. Esto quiere decir que revitaliza, oxigena e ilumina el tejido dermatológico.
Recomendaciones y contraindicaciones de los masajes con piedras calientes
A pesar de las propiedades que tienen para el cuerpo los masajes con piedras calientes, existen una serie de recomendaciones que se deben tomar en consideración. Que sea un procedimiento natural no quiere decir que no pueda poseer contraindicaciones, por lo que te sugerimos prestar atención a los siguientes puntos.
Consultar con un médico
Antes de acudir a un centro donde realicen este tipo de masajes, es ideal que primero consultes con un médico sobre tu problemática. Puede que lo que padezcas vaya más allá de un simple dolor muscular, por lo que primero es necesaria la revisión de un especialista.
En este sentido, hay algunos casos bajo los que no se recomiendan estas prácticas. Por ejemplo, si presentas trastornos hemorrágicos, quemaduras en tu piel o si te realizaste una intervención quirúrgica en las últimas seis semanas.
Realizar los masajes con profesionales
En cualquier procedimiento al que te vayas a someter debes investigar a profundidad sobre las personas que se encargarán de realizarlo. No todos conocen las técnicas adecuadas en cuanto a masajes con piedras calientes se refiere.
Por eso tienes que asegurarte de que lo estés realizando con profesionales con experiencia en el área. Así evitarás consecuencias graves, como quemaduras o empeoramiento de las lesiones.
Evitar en caso de tener roturas en la piel
Si posees hematomas, raspaduras, cortes o quemaduras, sin importar el grado que sean, este tipo de masajes se tienen que evitar a toda costa hasta que las lesiones sanen. La aplicación de piedras calientes sobre la piel puede aumentar el riesgo de sufrir daños más significativos. Además, pueden ser causantes de infecciones ocasionadas por bacterias provenientes de los aceites empleados.
No realizar en caso de enfermedad respiratoria
Esta sugerencia parece de sentido común, pero muchos no la toman en serio. Cualquier persona que tenga resfriado, gripe o fiebre debe evitar realizarse un masaje con piedras calientes hasta que no se encuentre recuperado en su totalidad.
Hay que recordar que el resfriado provoca dificultad para regular la temperatura corporal. En consecuencia, si se aplican piedras calientes sobre la piel la experiencia puede ser muy desagradable.
Los masajes con piedras calientes en el contexto de la terapia geotermal
En resumen, la terapia geotermal es una técnica segura y gratificante. Muchos de los que viven la experiencia aprecian cambios de relativa inmediatez en cuanto a la relajación de sus músculos se refiere, así como mejorías a la hora de dormir.
Si quieres animarte te dejamos unas recomendaciones finales que te serán de gran utilidad:
Asegúrate de ir a un lugar con experiencia previa que cuente con los métodos de higiene necesarios.
Comunícate con tu masajista y explícale el caso. De esta manera podrá adaptarse a tus necesidades.
Si presentas alguna duda, consulta primero con tu médico y luego con el masajista.
Informa al masajista si padeces de alguna condición de salud.
Con respecto a la regularidad para hacerte masajes de este tipo, depende del tipo de persona que seas. Por ejemplo, si eres deportista puedes hacerlo de dos a tres veces por semana en entrenamientos intensos. Si mantienes una menor actividad física, puedes acudir una o dos veces por mes.
