La Haya, 22 dic (EFE).- Las autoridades sanitarias neerlandesas anunciaron este martes la suspensión de los tratamientos no esenciales en hospitales y clínicas para “aliviar” al personal sanitario de la atención más crítica, y dispuso para adultos las camas de UCI reservadas a niños, ante la presión hospitalaria provocada por el aumento de contagios de coronavirus.
La suspensión de la atención planificada busca liberar a los sanitarios para garantizar los tratamientos agudos y críticos panificables e inmediatos, lo que se limitará a los casos que exigen atención médica en un plazo de seis semanas para prevenir daños mayores, como las cirugías de cáncer o trasplantes de órganos, confirmó la ministra de Atención Médica, Tamara van Ark.
Los hospitales neerlandeses, que esperan alcanzar su pico en enero, están ya lidiando con un aumento de la presión debido al creciente número de pacientes con covid-19 que requieren ingreso hospitalario, junto a un alto absentismo causado por la gran carga de trabajo y los contagios entre los sanitarios.
Van Ark lamentó que los hospitales “estarán hasta arriba en las próximas semanas”, al tiempo que pidió “de nuevo a todos que se adhieran a las medidas del confinamiento porque solo entonces se podrá mantener la atención médica accesible a todo el que la necesite”.
CAMAS DE UCI
Uno de los puntos más críticos está en las unidades de cuidados intensivos (UCI), por lo que las autoridades sanitarias están tratando de aumentar el número de camas de UCI de las actuales 1.150 a 1.450 unidades, mientras se traslada a pacientes en estado grave a hospitales al otro lado de la frontera. Ayer fueron desviados al menos dos enfermos con covid-19 a Alemania.
Según el presidente de la red nacional de cuidados intensivos, Ernst Kuipers, se esperan al menos 640 pacientes con covid-19 ingresados en la UCI en la víspera de Año Nuevo, mientras que, al menos 1.900 personas estarán ingresadas con coronavirus en salas de enfermería normales, dos predicciones muy por encima de lo previsto inicialmente.
Ante esta situación, varios hospitales neerlandeses están entregando a pacientes adultos camas de las unidades de cuidados intensivos para niños, recoge el diario neerlandés Volkskrant.
En Países Bajos, se han instalado unas 110 camas de UCI solo para niños, repartidas en los siete hospitales universitarios del país y por donde pasan alrededor de 5.000 menores cada año, pero de momento algunas de estas camas se encuentran desocupadas porque no se ha producido este año el brote anual del virus sincitial respiratorio que habitualmente empieza en otoño.
“Solíamos poder trasladar a los niños al extranjero o a una cama de UCI para adultos en una situación de emergencia, pero esas opciones ya no son viables debido al coronavirus”, lamentó la presidenta de la consulta nacional para niños, Brigitte Timmers, que mostró su preocupación porque el cuidado de menores gravemente enfermos esté en riesgo.