El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha recibido su segunda dosis de la vacuna contra el coronavirus este sábado por la noche en el hospital de Sheba, cerca de Tel Aviv.
Junto a el gobernante de 71 años de edad, también se ha vacunado el ministro de Salud, Juli Edelstein, en un acto retransmitido en el canal de Youtube del primer ministro.
Netanyahu fue el primer vacunado de Israel el pasado 19 de diciembre y, desde entonces, 1,7 millones de personas han recibido al menos una dosis.
El país espera haber vacunado a todas las personas mayores de 16 años para finales de marzo y este viernes comenzó un nuevo confinamiento tras registrar una media de casos diarios alrededor de 8.000 contagios.
Días atrás, el premier alcanzó un pacto con la farmacéutica Pzifer para recibir suficientes vacunas con las que seguir con la rápida campaña de vacunación e inmunizar a todos los israelíes mayores de 16 años para fines de marzo.
“Hemos logrado traer las vacunas antes de lo planeado y en mayor cantidad”, aseguró el jefe de Gobierno, que no detalló el número exacto de vacunas que recibirá, y que busca evitar la ralentización de la campaña de inoculación que Israel lidera a nivel mundial.
Calificó el acuerdo como “un gran avance”, concretó que un primer avión con vacunas de la farmacéutica llegará este domingo y agregó que “habrá más” que vendrán “sucesivamente”, en un plan que denominó como “Operación Retorno a la Vida”. “Nos convertiremos en el primer país en salir del coronavirus” e “Israel será un modelo global”, aseguró Netanyahu.
El 18% de la población israelí -de nueve millones- ya recibió la primera dosis de la vacuna, igual que el 70% de personas en riesgo y más vulnerables al virus.
Tras iniciar su campaña de vacunación hace poco más dos semanas, Israel tiene el promedio de inoculados por habitante más alto del mundo, ha vacunado a más de 1,7 millones de ciudadanos y esta semana comenzó a administrar la segunda dosis necesaria para la inmunidad.
Hasta ahora ha inoculado solo con vacunas de Pfizer, y pero ya recibió un primer lote de la farmacéutica Moderna que añadirá a la campaña.
CONFINAMIENTO
El tercer confinamiento en Israel, que rige desde hace dos semanas, se endureció el último viernes con una serie de nuevas restricciones que incluyen la interrupción de la educación presencial y la limitación de viajes al extranjero con el fin el parar el incesante aumento de contagios.
A pesar de contar con la campaña de vacunación más veloz del mundo, Israel continúa luchando contra una indomable tercera oleada de la pandemia, que registró ayer más de 7.500 nuevos contagios y que ha obligado al Gobierno a implementar nuevas y severas medidas.
Cuando el pasado 27 de diciembre entró en vigor el actual cierre, que en principio se extendería por 14 días, Israel registraba cifras cercanas a los 4.000 contagios diarios de coronavirus y el índice de pruebas positivas en el 4 %, que ha llegado a duplicarse.
Las restricciones eran relativamente laxas, apenas suficientes para catalogarlo como confinamiento, por el listado de excepciones, y más laxo aún fue el cumplimiento por parte de la población.
A medida que fueron pasando los días, lejos de acercarse a la meta trazada por el Gobierno de mil contagios diarios, las cifras aumentaban: primero 5.000, luego 5.500, 6.000, 7.000 y esta semana se superaron los 8.000, con índices de positivos en torno al 8 %.
Ante este escenario, el Gobierno aprobó el endurecimiento y extensión del confinamiento dos semanas más casi de manera automática y sin titubeos.
Así, a partir del 8 de enero, el límite de 10 personas en reuniones en interior se redujo a 5, y el de 20 en exterior a 10. Las escuelas quedarán cerradas, al igual que el resto de las instituciones educativas con la excepción de las de educación especial.
Los viajes al exterior, hasta ahora limitados para extranjeros, quedan a partir de hoy restringidos también para los israelíes, que solo podrán volar si ya tenían billetes comprados o si reciben autorización de un comité especial. Y el transporte público, que ya funcionaba en formato reducido, deberá limitar su ocupación a no más de un 50 %.
Estas nuevas medidas, a las que se prevé se agregue una mayor presencia y control policial en las calles, se suman a la prohibición de trasladarse más allá de un kilómetro del domicilio y visitar a otras personas en sus casas.
Por otra parte, se mantiene el cierre de los comercios no esenciales, muchos de los cuales habían continuado operando y que, ante el aumento de controles, se cree deberán ahora dejar de funcionar.
Estas restricciones se extenderán inicialmente por un período de dos semanas, hasta la medianoche del próximo 21 de enero, por lo que el actual tercer confinamiento duraría, al menos, tres semanas y media.
PRIMEROS CASOS CEPA SUDÁFRICA
El Ministerio de Salud ha anunciado este sábado la detección de cuatro infecciones con la variante de coronavirus que apareció en Sudáfrica.
Se han encontrado dos cadenas de infección: una prueba positiva de una persona quien ha llegado al país y una familia que se contagió a través de otra persona.
La entrada en Israel desde Sudáfrica es solo posible en casos excepcionales.
Desde el comienzo de la pandemia Israel registra 474.000 casos de coronavirus, de los cuales 65.500 se encuentran activos, 873 de ellos en estado grave. Desde el mes de marzo, 3.565 personas han fallecido en el país por la enfermedad.