En el último tiempo, y según datos oficiales, sabemos que los chicos consumen cada vez menos leche y más bebidas azucaradas, gaseosas y jugos artificiales. De hecho, la evidencia indica que 1 de cada 3 niños no desayuna y el 25% de ellos no consume leche en el desayuno y la reemplaza por bebidas azucaradas que aportan calorías vacías. O sea, no aportan nutrientes.
Sé que hoy en día la leche y sus derivados han sido objeto de cuestionamientos por parte de algunos sectores. Pero lo único cierto hasta el momento es que no existe evidencia científica que fundamente una razón para no incluirlos. En las guías alimentarias para la población argentina del Ministerio de Salud de La Nación la recomendación es consumir al menos 3 porciones de lácteos por día, para todas las edades.
Esto equivale por ejemplo a un vaso de leche* (200 ml), una porción de queso (30 g) y un vaso de yogur (200 c/c). El consumo adecuado de leche, y lácteos en general, aporta proteínas, vitaminas A, B, C y D, y ayuda a tener una estructura ósea más saludable; incluso, se relaciona con la prevención de enfermedades cardiovasculares y de obesidad.
Si bien encontramos calcio en otros alimentos que no son de origen animal, en ellos su biodisponibilidad (como nuestro cuerpo puede absorber para aprovecharlo) es mucho menor. Para darte una idea, la cantidad de calcio que tiene un vaso de leche equivale a la que tienen tres plantas de brócoli.
Muchas veces los chicos pueden transitar periodos en los que rechazan todo un grupo de alimentos, pero por lo general son momentáneos y se resuelven solos. En ese caso, si durante la consulta pediátrica ves que la curva de velocidad de crecimiento es normal mi consejo es que no te desesperes.
Si como adulto responsable, tu decisión es que tus hijos tomen leche, te dejo algunas ideas para que pruebes otras preparaciones que incluyen leche sin tener que pasar por exigirles o presionarlos para que tomen los dos vasos de leche al día que se niegan a consumir
– Agregá leche en polvo a las preparaciones como rellenos, salsas, sopas y purés.
– La salsa blanca es una preparación sencilla, liviana y saludable.
– También podés reemplazar la leche por queso o yogur
Lo importante es que la decisión de excluir algún alimento importante de tu dieta, sea basado en decisiones personales, que se relacionen con tus gustos y preferencias pero siempre teniendo la mayor cantidad de información basada en la evidencia, que te permita tomar las mejores decisiones.
Arroz con leche sin azúcar
Ingredientes
– 700 ml de leche
– 150 granos de arroz
– 1 rama de canela
– Cáscara de limón
– Canela en polvo
– Edulcorante tipo stevia
Procedimiento
En una olla hervimos la leche junto a la canela y la cáscara de limón. Mientras, remojamos el arroz durante 5 minutos. Una vez que la leche esté hirviendo echamos el arroz a la olla escurriendo el agua sin dejar de revolver de rato en rato hasta que los granos estén hechos.