La OTAN destacó este miércoles su unidad frente a la conducta “agresiva” de Rusia en el extranjero y la “represión” dentro de su territorio nacional, al tiempo que insistió en la importancia de reanudar el diálogo entre la Alianza y Moscú.
“Aunque nuestra relación con Rusia sigue siendo muy difícil, nuestra reunión hoy demostró un fuerte acuerdo entre aliados y con nuestros socios”, declaró el secretario general aliado, Jens Stoltenberg, en la rueda de prensa posterior a la reunión de ministros de Exteriores de la OTAN celebrada ayer y hoy en Bruselas.
Este miércoles, los miembros de la Alianza debatieron el estado de las relaciones con Rusia, junto con el jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, y los ministros de Suecia y Finlandia, que no pertenecen a la OTAN.
“Pese a años de presión y esfuerzos para entablar un diálogo significativo, Rusia ha aumentado su patrón de comportamiento represivo en el país y su conducta agresiva en el extranjero”, dijo Stoltenberg.
En el ámbito interno, criticó la “opresión violenta de disidentes políticos” y resaltó que la Alianza pide “la inmediata liberación” del líder opositor Alexéi Navalni “y de otros manifestantes pacíficos que han sido arrestados”.
Por lo que al extranjero se refiere, Moscú “menoscaba y desestabiliza” a sus vecinos, incluidos Ucrania, Georgia y Moldavia, según el político nórdico, quien también acusó al Kremlin de intervenir en Bielorrusia y de intentarlo en los Balcanes Occidentales.
Asimismo, hizo referencia a la expansión militar del país en diferentes puntos del planeta, sus campañas de desinformación y propaganda, los esfuerzos por influir en elecciones, los ciberataques y el uso de armas químicas contra adversarios políticos.
“La respuesta de la OTAN es firme y consistente. En respuesta a las acciones de Rusia, la OTAN ha implementado el mayor refuerzo de nuestra defensa colectiva en una generación. Hemos incrementado nuestras ciberdefensas y defensas híbridas. Nos mantendremos vigilantes. Y seguiremos trabajando con la UE y nuestros socios cercanos para garantizar que respondemos a las acciones de Rusia juntos”, comentó.
En cualquier caso, Stoltenberg lamentó que desde verano de 2019 no haya habido encuentros del Consejo OTAN-Rusia, en el que se reúnen los aliados y Moscú para dialogar.
“Eso se debe a que Rusia no ha respondido de manera positiva a nuestra invitación (…). Lo lamento porque creo que el diálogo es importante, en especial, cuando son épocas difíciles como ahora”, aseveró.
Dijo creer en el diálogo con Rusia, “en parte para esforzarse por conseguir una mejor relación”.
“Pero incluso sin una mejora en las relaciones entre los aliados de la OTAN y Rusia, creo que al menos tenemos que gestionar una relación difícil con transparencia, reducción de riesgos y tambi con control de armas. Así que seguiremos trabajando por un diálogo con Rusia”, expuso.
Por su parte, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, aseguró que los aliados esperan que las relaciones con el Kremlin “sigan siendo un desafío en el futuro próximo”, pero subrayó que están “preparados” para ello y confió en que se puedan lograr unos vínculos con Moscú “al menos, previsibles y estables”.
Apuntó que seguirán trabajando con Rusia para lograr “avances” en los intereses de la Alianza, al tiempo que siguen exigiendo a Moscú rendir cuentas por sus acciones.
Además, advirtió de que la construcción del gasoducto Nord Stream 2, que llevará gas ruso a Alemania, “divide” Europa y expone a Ucrania y otros países del centro del continente a la “coacción” rusa.
El jefe de la diplomacia comunitaria, Josep Borrell, entre tanto, instó a que el club comunitario y la OTAN “contengan” a una Rusia “cada vez más autoritaria” cuando viole el Derecho Internacional.
Por otro lado, Stoltenberg dio la bienvenida a la decisión de Polonia de proporcionar vacunas para inmunizar al personal que trabaja en la sede de la OTAN en Bruselas.
EFE
