Por Massiel Bravo.- Una semana ha transcurrido desde el magnicidio del presidente de Haití, Jovenel Moise, y los procesos de investigación, la incertidumbre en la sociedad haitiana, las disputas de tres entes por quedar al frente de la nación, en adición al cierre de la frontera domínico-haitiana, son eventos que indudablemente contribuyen a que se acentúe la frágil situación económica, política y humanitaria que desde siempre viven los haitianos.
“Hablaban inglés y español con acento suramericano” fue la descripción que se dio a pocas horas del asesinato, lo que resultó en que 18 colombianos y dos estadounidenses de origen haitiano fueran detenidos en la ciudad de Puerto Príncipe, por presuntamente participar del atentado que costó la vida a Moise y dejó a su esposa, la primera dama Martine Moise, herida de gravedad.
Asimismo, cuatro mercenarios colombianos fueron ultimados a manos de la Policía haitiana cuando no habían transcurrido siquiera 24 horas del magnicidio.
Dos días después Colombia revelaría que sus ciudadanos recluidos en Haití, son miembros retirados del Ejército de colombiano.
Asimismo, el Gobierno de Colombia manifestó preocupación por la seguridad de los detenidos, por lo que solicitó a Haití este martes permitir el acceso de funcionarios consulares a los detenidos por supuesta vinculación en el crimen, e iniciar los procesos de repatriación de los cuerpos de los hombres que murieron durante hechos posteriores al magnicidio.
LAS INVESTIGACIONES. La fiscalía de Puerto Príncipe programó para esta semana algunos los interrogatorios relacionados al magnicidio del presidente Moise, donde se ha citado a empresarios, políticos y agentes de seguridad.
Para el lunes fueron solicitados los exsenadores Steven Benoit y Yauri Latourte y los empresarios Dimitri Vorbe y Jean Marie Vorbe. Benoit habría cuestionado la versión que se dio sobre el magnicidio en primera instancia, afirmando que el mandatario fue asesinado por agentes de su propio cuerpo de seguridad.
Mientras que el martes se convocó a los funcionarios de seguridad del Palacio Nacional, entre ellos el comisionado divisional, Jean Laguel Civil, el inspector principal y coordinador de seguridad presidencial Paul Eddy Amazan.
También, este miércoles la Fiscalía de Puerto príncipe espera al jefe de la Unidad de Seguridad General del Palacio Nacional, Dimitri Hérard, quien realizó varios viajes a Colombia con propósitos desconocidos, hecho que pudiera respaldar teoría afirmada por el exsenador Benoit.
AUTOR INTELECTUAL.– La policía haitiana detuvo a Christian Emmanuel Sanon, a quien vinculó como presunto autor intelectual del crimen contra Moise.
Según la versión de las autoridades, Sanon llegó al país en junio, en un avión privado con propósitos políticos y en compañía de mercenarios contratados por él mismo a una empresa de seguridad en Miami para realizar el atentado al presidente.
Al momento del arresto, a Sanon le fueron incautadas cuatro placas de vehículo dominicanas, un gorra de la Drug Enforcement Administration (DEA), seis pistolas y fundas de pistola, 20 cajas de cartuchos, cargadores de pistolas, 24 dianas de tiro sin usar, 2 vehículos y correspondencia dirigida a sectores del país.
EMPRESAS.- Por su parte, las autoridades colombianas investigan cuatro empresas que reclutaron a los colombianos involucrados en el magnicidio, que además fueron los organizadores del viaje de los mercenarios a República Dominicana, durante el cual visitaron distintos puntos turísticos de la ciudad capital y por donde llegaron a Haití.
El director de la Policía colombiana, Jorge Luis Vargas, manifestó en una rueda de prensa que los nombres de las organizaciones no podían ser revelados ya que se encuentran en proceso de verificación.
¿QUIÉN ES EL PRIMER MINISTRO?
Desde el asesinato de Moise, tres personalidades de la vida política del país se disputan el poder de la nación. Estos son el senador Joseph Lambert, el primer ministro interino Claude Joseph y el primer ministro designado Ariel Henry.
Claude Joseph es a quien Estados Unidos y la Embajada de Haití en República Dominicana reconoce como el primer ministro interino de Haití ya que antes del asesinato del presidente Moise, era este quien ocupaba el puesto.
Sin embargo, el doctor Ariel Henry también reclama su derecho a gobernar, ya que Moise día y medio antes de ser asesinado firmó su último decreto, que nombraba a Henry como primer ministro, aunque este no llegó a ser investido.
El último político que reclama el puesto es el senador Joseph Lambert, quien fue designado como presidente provisional por el Senado haitiano, luego de que diez senadores aprobaran esta resolución, aunque todavía la juramentación no se ha realizado debido a que la ceremonia pautada para pasado lunes se pospuso a petición de los senadores.
INTERVENCIÓN INTERNACIONAL
Tanto el Gobierno interino de Haití como el Gobierno dominicano han hecho peticiones a la comunidad internacional para que se extienda ayudas a la empobrecida nación.
Por su parte, Haití solicitó a Estados Unidos desplegar tropas de apoyo para proteger instalaciones de infraestructura y preparar elecciones tras el asesinato de Moise.
La secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, comunicó que Estados Unidos no ha descartado satisfacer la petición de las autoridades haitianas para enviar tropas a la vecina isla. Psaki afirmó que la delegación estadounidense ha hecho reuniones con las tres figuras que se disputan la presidencia.
Mientras que el presidente dominicano, Luis Abinader, pidió a la comunidad internacional diseñar un plan de ayuda para Haití que consiga eficientizar las investigaciones con respecto al asesinato de Moise.
CIERRE DE LA FRONTERA
El cierre de la frontera dominico-haitiana ha afectado de manera directa la actividad comercial en esa zona, debido a que se ha detenido la actividad del mercado binacional que se realiza dos veces por semana, lo que a su vez ha ocasionado una escasez de alimentos en los pueblos de Haití por el cese del comercio.
En ese tenor, el periodista experto en temas fronterizos, Vargavila Riverón, reveló que se ha estado transportando mercancía de manera irregular en presencia de los soldados que custodian la zona, debido a que a los nacionales haitianos se les han acabado los productos de primera necesidad.
CRISIS HUMANITARIA
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia advirtió que Haití actualmente vive su peor crisis humanitaria de los últimos tiempos, ya que el asesinato de Moise ha llegado acentuar la situación de vulnerabilidad que vive la nación.
La entidad afirmó que uno de cada tres niños necesita ayuda humanitaria por la violencia que azota al país y por la pandemia del coronavirus. A su vez, declaró que se hace complicado suministrar recursos para que la empobrecida nación pueda hacer frente a la crisis sanitaria, puesto que la inseguridad del país dificulta la entrada de vacunas, jeringuillas o medicinas.
