Jacek Olczak, director ejecutivo de la empresa tabacalera Philip Morris International, ha pedido al Gobierno del Reino Unido que vete los cigarrillos dentro de una década, una medida que prohibiría su propia marca Marlboro.
En una entrevista con The Daily Mail, Olczak aseveró que la compañía podría “ver el mundo sin cigarrillos y, de hecho, cuanto antes suceda, mejor será para todos”. Los cigarrillos deben tratarse como automóviles de gasolina, cuya venta se prevé prohibir a partir de 2030, comentó el ejecutivo.
Philip Morris International, que se separó de la compañía tabacalera Altria, vende Marlboro en gran parte del mundo. Sus ingresos en el Reino Unido rondan los 800 millones de libras esterlinas (1.100 millones de dólares) al año, según informes. Su exempresa matriz todavía fabrica y vende los cigarrillos en EE.UU., donde es el líder indiscutible del mercado.
Olczak, quien ha comprometido a Philip Morris con una estrategia de diversificación más radical que la mayoría de sus pares globales, apuntó que el “problema del tabaquismo” podría resolverse en el Reino Unido en “10 años como máximo”, enfatizando que esto solo puede suceder como parte de un esfuerzo más amplio respaldado por la regulación.
Según explicó al medio, esto significaría “absolutamente” dejar de vender cigarrillos tradicionales en el país europeo. De esta manera, la icónica marca Marlboro de la propia Philip Morris —que alguna vez se comercializó como un cigarrillo para mujeres, pero que se hizo famosa por las campañas publicitarias del ‘hombre Marlboro’— “desaparecerá” del Reino Unido.
Alternativas a la nicotina
Bajo la dirección de Olczak, quien asumió el cargo a principios de este año después de casi 30 años en la compañía, Philip Morris ha invertido mucho en alternativas a la nicotina, incluido su producto insignia IQOS. El dispositivo similar a un cigarrillo, que calienta el tabaco en lugar de quemarlo, tiene más de 20 millones de usuarios en todo el mundo.
A nivel global, la empresa obtiene casi una cuarta parte de sus ingresos de productos alternativos, una proporción mucho mayor que la de rivales como Altria e Imperial Tobacco.
En marzo, Philip Morris se comprometió a obtener la mitad de sus ingresos de productos para no fumadores y, a principios de este mes, la compañía anunció la adquisición de Vectura, un fabricante de inhaladores para la administración de medicamentos con sede en el Reino Unido, por más de 1.000 de libras esterlinas (1.375 millones de dólares), según reportó Financial Times.
Sin embargo, tanto los consumidores, como los expertos han expresado su escepticismo de que las empresas tabacaleras puedan abandonar por completo los cigarrillos tradicionales y afirman que algunas de las alternativas al tabaquismo son casi igual de dañinas.
Por RT
