Por: Wilma Martes
Protestas, secuestros, robos, hambre, un Presiente muerto y un terremoto parecieran no haber sido golpes suficientes para la vecina nación de Haití. Conforme pasa el tiempo, el pueblo haitiano se convierte en un país desdichado, azotado por una miseria permanente.
Al igual que la República Dominicana, Haití se prepara para ser azotado por el fenómeno atmosférico Grace, lo que para ellos resulta más inquietante ya que se verán obligados a recibirla en medio de los destrozos causados por el terremoto de 7,2 grados en la Escala de Richter que sacudió sus tierras este sábado.
Con gran incertidumbre esperan los haitianos el fenómeno que según los informes meteorológicos causarán lluvias severas con fuertes vientos, que a su vez podrían desencadenar inundaciones localizadas y deslizamientos de tierra en toda la región.
Con la situación actual que vive Haití tras este terremoto, que ha sido más fuerte que el registrado en esa porción de la isla en el año 2010 de 7,0 grados, sería devastador el paso de esta tormenta.
Las imágenes compartidas desde que ocurrió el desastre muestran las incontables estructuras destruidas y con posibles cadáveres debajo sobre los cuales la naturaleza la naturaleza volvería a arremeter.
Hasta el momento el hospital de la región con carpas a sus afueras atiende a los heridos que en su mayoría permanecen en las calles.
El gobierno de Haití declaró el estado de emergencia luego de más de 300 personas fallecieran tras un terremoto de magnitud 7,2 que azotó el país el sábado por la mañana, anunció el primer ministro Ariel Henry en una conferencia de prensa.
Tras su eventual paso por la República Dominicana durante este lunes próximo, la tormenta Grace estaría tocando territorio haitiano entre la noche del lunes y el martes solo tres días después del devastador terremoto.
