Al conmemorarse el Día Internacional de la Protección de la Capa de Ozono, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales firmó un acuerdo con el Consejo para el Desarrollo Estratégico de Santiago (CDES) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en el que unen esfuerzos destinados a eliminar las sustancias agotadoras del ozono, además de adoptar nuevas alternativas de gases refrigerante amigables al ambiente.
El objetivo de este acuerdo es convertir a Santiago en una ciudad sostenible que sirva de modelo a otras demarcaciones del país donde no solo el Estado se comprometa con esta misión, sino también estimular a las empresas y a toda la ciudadanía en reducir las sustancias dañinas al ozono y al clima.
La firma del pacto, que tiene una duración de cinco años y busca replicarse en todo el país, estuvo encabezada por el ministro Orlando Jorge Mera; Ricardo Fondeur Victoria, presidente del CDES; Inka Mattila, representante residente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y José Ricardo Zarzuela, presidente de la Asociación de Técnicos Profesionales en Refrigeración y Acondicionamientos de Aires de Santiago (ATEPREASA).
Con este y otros acuerdos que vendrán próximamente, buscan que para el año 2025, se prohiba el esparcimiento en el aire de todos los gases que afectan la capa de ozono y para el 2028, controlar todos los gases que producen el calentamiento global, gracias al Protocolo de Montreal y la implementación de la Enmienda de Kigali que impulsa a las naciones a eliminar los hidrofluorocarbonos (HFC), ya que estos refrigerantes son potentes gases de efecto invernadero.
“En esta fase pretendemos para el año 2024 disminuir el 97.5% del consumo de los gases HCFC y su eliminación al 100% para el año 2028, por lo que estaremos adelantando varios años el cumplimiento de nuestro compromiso a 2030, exigido por el Acuerdo del Protocolo de Montreal”, resaltó el ministro.