Un estudio de abogados de Panamá fue señalado este domingo como uno de los involucrados en la creación de sociedades opacas para esconder dinero de grandes personalidades, perjudicando aún más la reputación de este país centroamericano, ya implicado en los “Papeles de Panamá”.
Los “Papeles de Pandora”, nueva pesquisa a cargo del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés), señala al bufete panameño de abogados Alcogal como uno de los creadores de sociedades opacas para ocultar dinero.
“Cuando la élite latinoamericana quiso ocultar su riqueza recurrió a esta firma de Panamá”, dice ICIJ en referencia a la firma Alemán, Cordero, Galindo y Lee (Alcogal).
Según la investigación, basada en la filtración de 11,9 millones de documentos de más de una decena de despachos de varios países, a través de Alcogal se establecieron compañías opacas “para 160 políticos y funcionarios públicos”.
Entre esos funcionarios habría “algunos acusados de saquear a sus países”, agrega el consorcio de periodistas.
– Alcogal rechaza acusaciones –
Alcogal sirvió, según la investigación, a figuras involucradas en algunos de los escándalos más notorios de América Latina, como la trama de sobornos de la constructora brasileña Odebrecht, el “saqueo de activos públicos venezolanos” y el “Fifagate”.
Este despacho habría servido además para la creación de sociedades al rey de Jordania, Abdulá II y los primeros ministros de la República Checa, Andrej Babis, y de Montenegro, Milo Djukanovic.
Según la investigación, también recurrieron al bufete tres expresidentes de Panamá –Ernesto Pérez Balladares, Ricardo Martinelli y Juan Carlos Varela– y uno de Honduras, Porfirio Lobo.
Varela reconoció en un comunicado ser accionista de la sociedad con la que se le vincula, pero declaró que dicha sociedad es “transparente”.
Por su parte, Martinelli negó ser cliente de Alcogal y manifestó que el informe contó con la colaboración de “algunos panameños resentidos sociales”.
El despacho panameño rechazó las acusaciones y anunció posibles medidas legales para defender su reputación “de manera vigorosa en las instancias que sea necesario”.
“Alcogal rechaza las conjeturas, imprecisiones y falsedades de las publicaciones”, manifestó el bufete, que se ofreció a cooperar con las autoridades para investigar posibles irregularidades.
– Otro golpe a la reputación –
Esta es la segunda ocasión en que una oficina panameña de abogados se ve envuelta en un escándalo internacional sobre sociedades opacas.
En 2016 el país centroamericano fue el epicentro de los llamados Papeles de Panamá, otra investigación de ICIJ basada en la filtración de 11,5 millones de documentos provenientes del bufete Mossack Fonseca, que tuvo que cerrar tras el escándalo.
La investigación reveló la ocultación de propiedades, empresas, activos, ganancias y evasión tributaria de jefes de Estado y de gobierno, líderes de la política mundial, personalidades de las finanzas, los deportes y las artes.
Los exmandatarios de Islandia, Sigmundur David Gunnlaugsson; de Pakistán, Nawaz Sharif; de Gran Bretaña, David Cameron y Argentina, Mauricio Macri, además del astro del fútbol Lionel Messi y el cineasta español Pedro Almodóvar fueron solo algunos de los mencionados en aquella ocasión.
– Temor del gobierno –
En un comunicado el domingo, el gobierno panameño de Laurentino Cortizo dijo estar trabajando para “contrarrestar las repercusiones negativas de cualquier escándalo tangencial o coyuntural en el que se quiera involucrar al país”.
Aseguró además que se han comunicado con el equipo directivo de CICJ, a los que han solicitado “evitar las referencias sin justificación informativa asociadas al país”.
De acuerdo con el gobierno, este planteamiento lo hacen “sin menoscabo a la libertad de prensa e información” y con la intención de “evitar apreciaciones sensacionalistas como las que en el pasado nos han causado gran daño”.
El sábado, Panamá ya había expresado su temor de que esta publicación termine por hundir su imagen internacional, muy deteriorada tras los Papeles de Panamá.
“El daño podría ser insuperable”, advirtió el gobierno de Cortizo al ICIJ, a través de una carta enviada mediante sus abogados.
La misiva destacó también algunas reformas legales tras los Papeles de Panamá, aunque el país permanece en la lista de paraísos fiscales de Francia y la Unión Europea.
Esas reformas incluyen mayores controles bancarios, penalización de la evasión fiscal con cárcel e intercambio de información financiera bajo parámetros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
El Panamá de 2016 “no se parece en nada al Panamá de hoy”, afirmó el gobierno en su carta.
AFP