Por Joel Suriel.- Los tres presidentes latinoamericanos que han sido mencionados en la investigación del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación llamada Pandora Papers, sobre sociedades offshore en paraíso fiscales, tienen algo en común y es su vida empresarial antes de alcanzar la jefatura de sus respectivos estados.
Tanto el presidente dominicano, Luis Abinader, como sus homólogos Sebastián Piñera, de Chile, y Guillermo Lasso, de Ecuador, han amasado una gran fortuna debido a sus actividades empresariales.
Esta investigación pone el foco en las finanzas secretas de más de 300 funcionarios públicos, como ministros, jueces, alcaldes y generales de más de 90 países que usaron una telaraña de fideicomisos y sociedades fantasma en sitios como las Islas Vírgenes Británicas, Panamá o el estado de Dakota del Sur en EE.UU. para no pagar impuestos.
VIDA EMPRESARIAL Y PATRIMONIO DE LUIS ABINADER. En septiembre pasado, el presidente Abinader declaró un patrimonio por valor de RD$4,396 millones de pesos.
El presidente tiene gran parte de su capital invertido en acciones de varias empresas que sobrepasan los RD$3,600 millones de pesos, repartidos entre empresas como Imer, S.A, O&M S.A.S. y Estrella Corporation.
Los documentos filtrados y analizados por 600 periodistas de 150 medios, muestran que Abinader está vinculado a dos sociedades en Panamá: Littlecot, Inc, que posee junto con su hermana y su hermano, y Padreso, S.A., de la que los tres hermanos son accionistas.
En su patrimonio se especifica que el mandatario dominicano posee un apartamento por valor de RD$35.4 millones de pesos; otros 31 millones por joyas y relojes; 2.9 millones en equipos audiovisuales, y otros 15 millones de pesos en obras de arte.
En electrodomésticos reportó 14.6 millones de pesos y en muebles del hogar otros 23.4 millones, además de haber declarado una residencia de 78.4 millones de pesos.
En un acápite de ingresos varios el presidente reportó 70 millones 200 mil pesos por un fideicomiso de administración. Esos ingresos los recibe cada año.
Sobre las herencias recibidas, el Jefe de Estado afirmó haber recibido el monto de RD$393,085,047 de su fallecido padre, José Rafael Abinader, mientras que de su suegro fue recipiente de RD$3,267,484.
SEBASTIÁN PIÑERA EN CHILE. Sebastián Piñera, el hombre que ha sido presidente de Chile en dos ocasiones y que actualmente gobierna el país, es la séptima persona más rica de esa nación país y la 745º a nivel mundial según la Revista Forbes. Su fortuna asciende a 2.700 millones de dólares.
El presidente desciende de una familia chilena de élite y su vida está marcada por los negocios. Los mismos involucraron diversas ramas: inmobiliaria, aerolíneas, supermercados, recursos naturales, televisión, tarjetas de crédito y equipos de fútbol, entre otros.
Desde el comienzo los negocios de Piñera estuvieron envueltos por la polémica. El inicio de su historial en el mundo empresarial se puede fechar en 1977 cuando ingresó al negocio bancario brindando asesoría al Banco de Talca a través de su firma Infinco.
Dos años más tarde, fue nombrado gerente general del banco al que prestaba asesoría. Durante la gerencia general de Piñera el banco tenía prestado 200 millones de dólares, cinco veces su capital y reservas, cuando la ley permitía un límite máximo de 25 %.
Los mismos se otorgaban a sociedades fantasmas. A su vez se aprovechó de beneficios que el Banco Central otorgaba a exportadores, fingiendo exportaciones en empresas relacionadas. Por estos motivos en 1982 ordenaron su arresto por fraude al Banco de Talca e infracciones a la Ley General de Bancos.
Piñera evitó la cárcel estando prófugo veinticuatro días hasta que sus abogados obtuvieron un recurso de amparo que garantizó su libertad.
Sus negocios inmobiliarios también estuvieron viciados por la polémica, ya que –entre otras cosas- con ellos despojó de sus territorios a pueblos originarios. Tal es el caso de la compra de 6 millones de hectáreas en Isla Grande, Chiloé, para construir el Parque Tantauco en 2004.
El proyecto se llevó adelante pero tuvo el rechazo de las comunidades huiliches que reclamaban sus derechos sobre las tierras, amparados en el Tratado de Tantauco.
Su paso más conocido por el mundo de los negocios es el de LAN Chile. En 1994 compró el 16 % de la aerolínea y posteriormente llegó a ser presidente de la misma.
También se registraron polémicas en torno a esta actividad: en 2009 la Superintendencia de Valores y Seguros lo multó por comprar 3 millones de acciones de la compañía, luego de haber accedido a información privilegiada al haber sido parte de la sesión de directorio donde se había presentado de manera reservada el balance del trimestre anterior.
LA VIDA EMPRESARIAL DE GUILLERMO LASSO. Lasso es un conocido banquero y empresario ecuatoriano que participa en distintos conglomerados financieros.
Suele referirse a un origen familiar humilde que lo llevó a comenzar a trabajar con 15 años en la Bolsa de Valores de su ciudad, Guayaquil. Así trata siempre de quitarse la etiqueta de banquero rico que no se preocupa de los más humildes.
Lasso es miembro del Opus Dei pero dice estar dispuesto a abrir el debate sobre la despenalización del aborto.
Fue rápidamente escalando posiciones hasta convertirse en presidente del Banco de Guayaquil por casi 20 años. A comienzos de los 90, llegó a liderar la Asociación de Bancos Privados del Ecuador.
En agosto de 1999 fue nombrado ministro de Economía, pero debido a las diferencias que tuvo con el entonces presidente Jamil Mahuad sobre cómo manejar la economía del país renunció un mes después.
Lasso dejó el Banco de Guayaquil en 2012, tras una larga carrera en el mundo financiero, donde comenzó como gerente de Procrédito, para ser luego vicepresidente y presidente de Finansur, los mismos cargos que ocupó en el citado banco.
Pero la trayectoria como emprendedor de Lasso, de 61 años, había comenzado muchos años antes, casi sin darse cuenta, en su infancia, cuando confeccionaba monigotes de “Año Viejo” y los vendía por unas monedas que gastaba en caramelos.
Entre 1977 y 1980 trabajó como gerente en Procrédito y en 1978, fundó, junto con su hermano Enrique, la constructora Alfa y Omega.
En 1980 entró en Financiera del Sur (Finansur), entidad en la que fue vicepresidente ejecutivo y presidente, y que en 1989 se fusionó con el Banco de Guayaquil.
En 1989, con 34 años, Lasso se convirtió en vicepresidente y gerente general del Banco de Guayaquil, y en 1994 fue nombrado presidente ejecutivo de la entidad.
A la política llegó en 1998, cuando fue designado gobernador de la provincia de Guayas, cargo que desempeñó hasta agosto de 1999 para convertirse en “superministro” de Economía del Gobierno de Mahuad. Eso le dio una cierta perspectiva del mundo político desde dentro y le ayudó a conseguir experiencia para aspirar a la Presidencia.
Tres presidentes y 11 expresidentes de países de América Latina figuran en los Pandora Papers, una de las mayores filtraciones de documentos financieros que se haya publicado.
Son casi 12 millones de documentos que revelan el uso de compañías offshore en paraísos fiscales, la riqueza secreta, la evasión de impuestos o, en algunos casos, el lavado de dinero por parte de las personas más poderosas y adineradas del mundo.