Policías no tienen suficientes chalecos antibalas, ni armas ni equipos para trabajo ordinario, dice informe

El informe final de la comisión especial para la Reforma Policial reveló que la Policía Nacional (PN) no cuenta con un presupuesto detallado por centros de costo, una pensión digna, infraestructuras adecuadas, tecnología ni equipos de comunicación eficientes y de trabajo ordinario.

En cuanto a equipos de protección y seguridad, esta entidad no cuenta con suficientes chalecos antibalas, ni armas ni equipos para el trabajo que deben realizar adecuadamente, y los agentes de nuevo ingreso se quedan sin equipos de protección y sin armas por su baja disponibilidad.

De acuerdo al informe realizado por la comisión Grupo de Trabajo al organismo, los chalecos antibalas de los policías tienen fechas de vencimiento, y no hay evidencia de que estos sean sustituidos oportunamente.

Presupuesto PN

La Policía Nacional no cuenta con un presupuesto detallado por centros de costo, ni dividido entre la Dirección General y las direcciones regionales, ni tampoco detalles de su ejecución, según el informe.

Tampoco existe una categorización de los tipos de destacamento, ni de los requerimientos de dotación de personal, equipos de protección, tecnología, equipos de transporte, dimensión y facilidades de la infraestructura ni necesidades de comunicación.

“En consecuencia, cuando los fondos, de por sí insuficientes, llegan a la Policía Nacional, los mismos son distribuidos en función de las urgencias, necesidades inmediatas y rangos, independientemente de quien los hubiere solicitado en el origen”, sostiene.

Lo mismo ocurre con los equipos de transporte, los cuales son asignados en base a las urgencias del momento, tal como lo dice el documento oficial, pues cuando llegan a la Policía no tienen asignaciones previas.

Los gastos para mantenimiento preventivo y para reparaciones de equipos tampoco son consignados en el presupuesto, solo el consumo de combustibles, “lo que da lugar a un deterioro rápido de los equipos nuevos, debido a la falta de recursos y planificación para mantenerlos adecuadamente de forma proactiva”, dice el informe.

Pensiones

La Policía Nacional cuenta con unos incentivos inadecuados, “altamente discrecionales”, llamados “Sistema de Reparto Especial y/o especialismos”, que es un sistema de remuneración del personal, es decir, unos ingresos adicionales sobre el salario básico.

Sin embargo, Grupo de Trabajo explicó que el sistema genera una serie de distorsiones, retrasos de pagos e injusticias a la hora de retirar o pensionar al Policía.

El policía retirado por discapacidad o pensión solo recibe el salario básico hasta que no empieza el pago de la pensión completa, por lo que deben pasar por penurias económicas “injustificables”, cuya duración es impredecible.

Casos de hasta dos años de antigüedad en la situación de salario reducido fueron encontrados al momento de la investigación para el informe. Tampoco existe un estudio actuarial que permita proyecto el costo de adecuación de este sistema a los requerimientos de la Ley 590-16.

Infraestructura y tecnología

Los agentes tampoco cuentan con la infraestructura adecuada para las labores que realizan, existiendo destacamentos con piso de tierra y sin las más “mínimas condiciones sanitarias” para operar.

También hace falta una tecnología y equipos de comunicación eficiente y en suficiente cantidad y alcance para que esta entidad pueda salvaguardar la seguridad ciudadana en las calles del país.

Recomendaciones de la comisión

La comisión recomienda establecer los centros de costos por región, provincia, ciudad, localidad y destacamentos, y establecer también el tipo o tipos de destacamentos que debe haber en cada lugar y dónde deben estar ubicados.

Asimismo, que se elabore un presupuesto desde los propios centros de costo; dividir el país en regiones; y adquirir y poner a funcionar eficientemente en la Policía un sistema interno para darle seguimiento a la ejecución presupuestaria por centro de costo.

También, hacer una licitación con términos de referencia bien detallados y elaborados para adquirir un “software” que funcione en la nueva plataforma tecnológica de la Policía.