El volcán Wolf, ubicado en la isla Isabela del archipiélago de Galápagos, en Ecuador, continúa su actividad eruptiva, que inició la noche del pasado jueves 6 de enero.
El volcán presenta una actividad superficial e interna “alta”, detalla el Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IGEPN) este martes en su último informe sobre el coloso.
No obstante, el instituto señala que las imágenes satélites muestran “una disminución en la cantidad de gas emitido”, así como en la cantidad de alertas termales generadas.
“Se estima que los flujos de lava se encuentran muy próximos o ingresando al mar”, dice el IGEPN en su documento.
La información coincide con la otorgada por el Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica, que señala que “los flujos de lava se ubican a menos de 5 kilómetros de la costa, hacia el lado este de la isla”.
“El magma ha recorrido unos 15 kilómetros desde el inicio de la actividad, se ha desplazado por antiguos campos de lava de erupciones anteriores y sobre vegetación de la zona árida de Galápagos, donde predominaban bosques de palosanto, chala, romerillo y otras especies de flora nativa y endémica”, dice la cartera de Ambiente.
La situación fue constatada por el titular del Ambiente, Gustavo Manrique, quien realizó un sobrevuelo por la zona.
La iguana rosada fuera de peligro
El área donde se encuentra el volcán es el hogar de especies únicas en el mundo, como la iguana rosada.
“La dirección que han tomado los flujos de lava y el desarrollo general de la erupción, nos permite señalar que la población de iguana rosada se mantiene fuera de peligro”, dijo Manrique al respecto.
Por su parte, Danny Rueda, director del Parque Nacional Galápagos, comentó que “las poblaciones de iguanas, tortugas y aves se encuentran al norte del volcán, donde históricamente se ha registrado menor actividad volcánica”.
Rueda explicó que en la zona de impacto de la erupción “existe muy poca fauna emblemática”, sin embargo, añadió que “las especies han evolucionado con estos procesos naturales que son parte de la dinámica normal de los ecosistemas en Galápagos”.
Fuente: RT