Viena, EFE.- El 31 % de los más de 13.300 fallecidos hasta ahora por la covid-19 en Austria vivían en residencias de ancianos o para personas discapacitadas, una incidencia que fue especialmente fuerte a finales de 2020, cuando representaron casi la mitad de todas la víctimas.
Los datos, facilitados por el Ministerio de Sanidad a preguntas del partido liberal NEOS, señalan que en 2020, el primer año de la pandemia, el 42 % de todos los fallecidos por la enfermedad fueron residentes de asilos.
Entre noviembre de 2020 y enero de 2021, ese porcentaje llegó a subir al 45 %.
La campaña de vacunación arrancó en Austria el 27 de diciembre.
Aunque el impacto de la covid en las residencias disminuyó en 2021, casi uno de cada cuatro fallecidos ese año vivía en esos centros.
“Después de dos años de pandemia, no puede ser que todavía no podamos hacer que las residencias de ancianos sean seguras”, ha denunciado el partido NEOS, que reclama que el personal que trabaja en esos centros se someta a más pruebas de diagnóstico para detectar infecciones, informa la agencia APA.
Actualmente, el 86,5 % de los residentes en Austria mayores de 65 años tiene la pauta completa de vacunación en vigor.