Leidy Zorrilla.- Empresas multinacionales y países europeos, Estados Unidos y Canadá castigan a Rusia decidiendo limitar o no comprar petróleo y gas natural producido en esa nación, en repudio a la invasión que ejecuta en Ucrania.
La exportación de petróleo y gas natural es esencial para la economía rusa.
Las sanciones le llueven al presidente Vladimir Putin por su incursión militar en su país vecino, el pasado 24 de febrero.
Algunas empresas han llegado a la conclusión de que los riesgos, tanto financieros como reputaciones, son demasiado grandes para continuar los intercambios comerciales con las petroleras.
Las medidas fueron tomadas por naciones de la Unión Europea, Reino Unido, Alemania, Estados Unidos, Canadá y otras naciones.
También las multinacionales petroleras Shell, BP, Exxon Mobil, Equinor y otras.
LA SHELL. La sanción más reciente la hizo la petrolera anglo-holandesa Shell, quien decidió dejar de comprar de manera inmediata el crudo y pidió disculpas por las críticas recibidas por haber comprado el fin de semana a un precio especial.
Asimismo, la multinacional también anunció que cerrará todas sus estaciones de servicio en el país, además de detener sus operaciones de combustible y lubricantes de aviación.
Cuando estalló el conflicto en Ucrania, la empresa de energía BP se vio bajo presión inmediata.
La compañía posee una gran participación en el gigante energético ruso Rosneft, pero a los pocos días anunció que se retiraría de sus operaciones.
El inversor extranjero más importante en Rusia, BP, fue el primero en comunicar que desharía su participación del 20% en Rosneft, una medida que estaría valorada en unos 25.000 millones de dólares (22.500 millones de euros) e implicaría reducir su producción mundial de petróleo y gas en un tercio.
A esto le siguieron de cerca las promesas de Shell, ExxonMobil y Equinor de recortar sus inversiones rusas tras la presión de los accionistas, así como de los gobiernos y el público.
EXXON MOBIL. La petrolera tejana Exxon Mobil, ha frenado la explotación de pozos, iniciado la salida de su personal de Rusia y puesto un alto a todas sus inversiones futuras en Rusia en respuesta a la invasión del régimen de Vladímir Putin a Ucrania.
Exxon controla el 30% y comparte la explotación con la japonesa Sodeco, la india ONGC Vinesh y la rusa Rosneft.
Equinor.
A cuatro días de haber iniciado la invasión de Rusia a Ucrania, Anders Opedal, presidente y CEO de Equinor, anunció su decisión de suspender las nuevas inversiones con Rusia e informó el proceso de salida de las empresas conjuntas rusas de Equinor.
Equinor dijo que presentará un compromiso para contribuir a la financiación del esfuerzo humanitario en la región.
Las limitaciones comerciales con el petróleo ruso no se limita a multinacionales, también abarcan a países que han retirado sus negociaciones con Rusia y han limitado la importación y compra de crudo.
EE.UU. Los norteamericanos se unieron este martes a la fila de países que han retirado sus negociaciones con el petróleo ruso. Así lo anunció el presidente, Joe Biden.
Las sanciones incluirán la prohibición de importar petróleo, carbón y gas natural licuado.
Estados Unidos solo obtiene de Rusia el 1% de su consumo y el 3% de sus importaciones de petróleo crudo.
Cuando se suman también los derivados del petróleo, la cifra llega al 8% del consumo. Los datos preliminares del departamento de energía de EEUU revelan que, en la última semana del mes de febrero, ese país no compró petróleo ruso.
CANADÁ. Fue el primer país del G7 que prohíbe todas las importaciones de crudo desde Rusia. Así lo anuncio el 28 de febrero el primer ministro del país, Justin Trudeau.
Trudeau señaló que la industria “ha beneficiado enormemente al presidente Putin y sus oligarcas”.
Canadá importa de Rusia crudo por valor de unos US$550 millones al año, según cifras de la Asociación Canadiense de Productores de Petróleo.
REINO UNIDO. Gran Bretaña también anunció una prohibición a las importaciones de petróleo ruso. El secretario de Negocios, Kwasi Kwarteng, dijo que el petróleo y los productos derivados del petróleo de Rusia se eliminarán gradualmente a finales de año para dar al mercado tiempo para adaptarse al cambio.
ALEMANIA. Los alemanes suspendieron la aprobación final del gasoducto Nord Stream 2, debido a las acciones tomadas por Rusia a Ucrania.
Nord Stream 2 tiene la capacidad de suministrar suficiente gas natural de Rusia a 26 millones de hogares en Europa.
Alemania importa de Rusia 55% de su gas y 42% de su petróleo y carbón, una dependencia por la cual el gobierno hizo una autocrítica tras la invasión de Ucrania, pero que tomará años para disminuir.
UNIÓN EUROPEA. La Unión Europea se propone eliminar totalmente su dependencia de los combustibles rusos “mucho antes del 2030” para asegurarse de que el bloque de 27 países no vuelve a enfrentarse a decisiones difíciles, con consecuencias peligrosas para sus economías, en el marco de crisis geopolíticas como la invasión rusa de ucrania.
Acordó eliminar en forma escalonada su dependencia de las importaciones de gas, petróleo y carbón rusos.
La Comisión de la UE, por otro lado, dijo que Europa podría aumentar la compra de gas natural licuado traído en barco en lugar del procedente de Rusia vía gasoductos e importando más gas de otros países.
La presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, dijo que tienen que independizarse del petróleo, el carbón y el gas ruso.
La UE importa el 90% del gas natural que usa para generar electricidad, calentar los hogares y abastecer la industria. Casi el 40% del gas que emplea el bloque proviene de Rusia, lo mismo que una cuarta parte del petróleo.
POSICIÓN DE LA IEA. La Agencia Internacional de Energía (IEA) anunció que los 31 países miembros de su Junta de Gobierno acordaron liberar 60 millones de barriles de petróleo de sus reservas de emergencia, como alternativa a medida que avanzan las sanciones.
En la actualidad, Rusia suministra el 26% del crudo consumido en la UE y el 38% del gas. Incluso un breve corte en el suministro de gas elevaría los precios de la energía.
Los analistas dicen que para eliminar la dependencia del gas natural ruso es imperioso reducir el consumo de ese combustible, comenzando por el sector industrial.