México (EFE).- Miles de indígenas mexicanos y encapuchados que militan en el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) marcharon este domingo contra “todas las guerras capitalistas” en Chiapas, en el sureste mexicano, donde se solidarizaron con Ucrania.
Los zapatistas marcharon en las ciudades emblemáticas que los guerrilleros tomaron en 1994: San Cristóbal de las Casas, Palenque, Margaritas y Ocosingo, donde exigieron un alto al conflicto armado en Ucrania pero también en Palestina, Kurdistán, Siria y el pueblo Mapuche de Chile.
“Fuera el ejército Ruso de Ucrania que desintegra a las familias”, fue una de las consignas del contingente, que se calculó en cerca de 5.000 personas.
Los encapuchados también coreaban lemas como “sí a la vida”, “no más persecución por los que luchan por la vida”, “que muera el sistema capitalista”, “alto a la guerra”, “no más presos“ y “ vida y paz en el mundo”.
EL INICIO DE UNA CAMPAÑA MUNDIAL
Aunque no quisieron dar declaraciones oficiales a la prensa, los zapatistas indicaron que con estas movilizaciones arranca “una campaña mundial en contra de las guerras del capital, cualquiera que sea su geografía”.
Por ello invitaron a realizar “conciertos, encuentros, festivales y reuniones, para sumarse a las artes contra las guerras”.
Por más de dos horas, los zapatistas caminaron rodearon la Plaza de la Paz, mientras que visitantes miraban la marcha pacífica y aplaudían.
Algunos empresarios cerraron algunos negocios por temor a actos vandálicos, pero la manifestación ocurrió sin incidentes.
CONTRA LA INVASIÓN RUSA
Los indígenas mexicanos convocaron a esta movilización masiva después de la invasión de Rusia en Ucrania que comenzó el 24 de febrero.
Según Kiev, la invasión de Rusia ha dejado más de 2.000 civiles muertos y 1.300 soldados, mientras que la ONU reconoce la muerte de casi civiles y más de 1.000 heridos.
Previo a la protesta, el subcomandante Moisés, vocero del EZLN circuló un manifiesto en el que denunció que “hay una fuerza agresora, el ejército ruso. Hay intereses del gran capital en juego”.
El movimiento indigenista, un referente de la izquierda a nivel internacional, pidió condenar las agresiones armadas sin importar “el bando”.
“Cuando la invasión multinacional a Irak (hace casi 19 años), con el ejército norteamericano a la cabeza, hubo movilizaciones en todo el mundo en contra de esa guerra. Nadie en su sano juicio pensó que oponerse a la invasión era ponerse del lado de Sadam Hussein”, expuso el pronunciamiento.
El EZLN indicó que “quienes ganan en esta guerra son los grandes consorcios armamentistas y los grandes capitales que ven la oportunidad para conquistar, destruir y reconstruir territorios”.
También criticó la incapacidad de Europa, Estados Unidos y otras potencias para detener la guerra.
“Los grandes capitales y sus Gobiernos de ‘occidente’ se sentaron a contemplar –e incluso a alentar- cómo la situación se iba deteriorando. Luego, iniciada ya la invasión, esperaron a ver si Ucrania resistía, y haciendo cuentas de qué se podía sacar de uno u otro resultado”, apuntó Moisés.
LA POSTURA DE MÉXICO
La manifestación de los zapatistas ocurre mientras el Gobierno de México, que ocupa un puesto en el Consejo de Seguridad de la ONU, afronta presiones para tomar una postura más enérgica en contra de Rusia.
El presidente Andrés Manuel López Obrador, que ha condenado la invasión rusa, ha rechazado aplicar sanciones económicas contra Moscú, como lo pidió el jueves la embajadora de Ucrania en México, Oksana Dramarétska.
Mientras que en Estados Unidos, senadores demócratas han acusado al Gobierno de México “ponerse del lado de Putin” por no unirse a las sanciones.
“Ya basta de indiferencia y titubeos del Gobierno de México, la defensa de la paz y seguridad tiene que ser frontal, enérgica y responsable”, expresó este domingo Alejandro Moreno, dirigente del opositor del Partido Revolucionario Institucional (PRI).