Bagdad, (EFE).- Un ataque con cohetes contra una refinería de la ciudad de Erbil, en el norte de Irak, provocó este domingo un incendio en uno de sus depósitos, que ya ha sido controlado, informó el Gobierno iraquí, que aseguró que la agresión no dejó víctimas mortales.
Los proyectiles fueron dirigidos contra una refinería del barrio de Jabat en Erbil, capital de la región autónoma del Kurdistán, “lo que provocó un impacto en uno de los depósitos principales de la refinería y un incendio en su interior que fue controlado por las autoridades competentes”, afirmó la Célula de Información de Seguridad gubernamental en un comunicado.
Según el documento, “otro misil impactó en el reciento exterior de la refinería” y no se registraron “víctimas mortales”, si bien no precisó si hubo algún herido.
En un principio, el departamento antiterrorista del Kurdistán había informado del lanzamiento de seis cohetes desde la localidad de Bartella, situada en la vecina provincia de Nínive, y que no habían provocado “daños significativos”.
El Gobierno Irak, el segundo mayor productor de crudo la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), aseguró por su parte que el ataque contra la refinería tenía como objetivo “afectar el suministro de energía eléctrica” y lo achacó a “bandas terroristas y criminales” sin dar más precisiones sobre los posibles responsables.
Según el comunicado, las fuerzas de seguridad movilizadas tras la agresión encontraron un lanzacohetes con cuatro cohetes en la cercana Llanura de Nínive, al oeste de Erbil, y desactivaron los proyectiles.
Este es el segundo ataque de este tipo en menos de un mes que sufre la refinería de Jabat, después de que el pasado 6 de abril seis cohetes cayeran en sus inmediaciones sin causar daños.
Los ataques con cohetes, así como con misiles y drones han sido habituales en Irak en los últimos dos años, si bien suelen ir dirigidos contra base militares y objetivos con intereses estadounidenses en Irak y son achacados a milicias proiraníes.
Sin embargo, las acciones contra objetivos petroleros han sido mucho más esporádicos.
En diciembre de 2020 la organización terrorista Estado Islámico reivindicó la explosión de dos pozos petroleros en un pequeño yacimiento de la provincia de Kirkuk, vecina al Kurdistán, y en mayo pasado levó a cabo otro atentado contra otros dos pozos de esa misa provincia que dejó dos muertos y tres heridos.