La Procuradora General de la República, Miriam Germán Brito, expresó su posición sobre la mediatización de algunos casos, advirtiendo que los funcionarios del Ministerio Público están en la obligación de respetar el debido proceso, sin dejarse llevar por los prejuicios ni tener “culpables favoritos”.
“El Ministerio Público debe ser imparcial y objetivo, y el funcionario no puede olvidarse que lo que él crea sobre el caso es simplemente su presunción sobre los hechos, pero esa presunción en sí no es ninguna prueba”, expresó la Magistrada.
Puntualizó que el que juzga y el que acusa debe cuidarse hasta de sus prejuicios, dado que algunas veces, la incidencia de la prensa y de la opinión pública puede desembocar en “juicios paralelos”.
“Se puede dar el caso que después de la tormenta inicial haya un proceso y se declare inocente a una persona, entonces… ¿quién te va a devolver lo que te quitaron a ti y a tu familia?, ¿quién va a reparar la vergüenza de tus hijos?”, cuestionó Germán Brito.
Asimismo, recalcó que todo servidor público en el ámbito de la justicia tiene prácticamente las mismas obligaciones: trabajar con imparcialidad, respeto por los justiciables, el no maltrato, y tener siempre presente que lo que él dictamine e investigue debe realizarse con ecuanimidad.