La esposa de Julián Assange reveló hoy que su esposo juró suicidarse si es extraditado a los EE. UU., luego de que Priti Patel firmó una orden para enviarlo a Virginia para enfrentar cargos de espionaje y una posible sentencia de cárcel de 175 años.
Stella Moris se ha comprometido a luchar contra la decisión con ‘todas las vías disponibles’, declarando: ‘Voy a usar cada hora del día luchando por Julia hasta que esté libre’.
Dijo que su esposo le había dicho ‘recientemente’ que planeaba suicidarse si era extraditado y reveló que una nueva apelación incluiría pruebas de que la CIA supuestamente intentó matarlo con veneno cuando se escondía en la embajada ecuatoriana en Londres.
Se produjo horas después de que el Ministro del Interior aprobara la orden emitida por un juez de la Corte de Magistrados de Westminster para llevar al fundador de WikiLeaks a Estados Unidos, donde será entregado a agentes federales y juzgado.
La Sra. Moris, que tuvo dos hijos con el fugitivo y se casó con él en la prisión de Belmarsh en marzo, dijo hoy en una conferencia de prensa en el centro de Londres: “No estamos al final del camino aquí”. Vamos a luchar contra esto. Vamos a utilizar todas las vías disponibles. Voy a usar cada hora del día luchando por Julian hasta que esté libre, hasta que se haga justicia’.
La Sra. Moris agregó: ‘Si es extraditado a los Estados Unidos, las condiciones en las que estará serán opresivas. Lo impulsará a quitarse la vida. Eso no es simplemente una discusión regular sobre la salud mental. Estamos hablando de llevar a una persona a quitarse la vida’.
Ella continuó: ‘Es muy difícil describir cómo es una familia. Nuestra determinación se redobla por cada decisión que se toma, que es una parodia. No tengo palabras para expresar cómo es ver que el proceso del Reino Unido se utiliza como una forma de prolongar el sufrimiento de Julian. Es muy fuerte… tenemos que contraatacar. Su instinto es contraatacar y el mío también. Vamos a luchar más fuerte’.
Y cuando se le preguntó si pensaba que sus hijos pequeños alguna vez se reunirían con su padre como un hombre libre, dijo: ‘Tenemos esa imagen y esa esperanza. Eso es lo que nos impulsa. Pero tenemos la convicción de que este error se corregirá y los tribunales, eventualmente, harán lo correcto’.
Assange, que actualmente se encuentra recluido en la prisión de máxima seguridad de Belmarsh, en el sureste de Londres , tiene 14 días para apelar. Su abogada, la abogada australiana de derechos humanos Jennifer Robinson, dijo que ahora “agotaría” todas las vías legales posibles, incluido ir a Estrasburgo, cuyos jueces inmovilizaron un avión que llevaba inmigrantes a Ruanda esta semana. Los crowdfunders han recaudado más de £55,000 desde principios de año para ayudar a pagar sus facturas legales.
Si alguna apelación es rechazada en las próximas semanas, o no llega a los tribunales, entonces no habrá más obstáculos que impidan que vuele a Estados Unidos, posiblemente en julio.
WikiLeaks declaró hoy que “no es el final” y se comprometió a volver a los tribunales para tratar de mantenerlo en Gran Bretaña, afirmando que hoy es un “día oscuro para la libertad de prensa y la democracia británica” y acusando a la Sra. Patel de elegir no “hacer lo cosa correcta’.
La abogada de Assange, la abogada australiana de derechos humanos Jennifer Robinson, dijo que ahora “agotaría” todas las vías legales posibles, incluido ir a Estrasburgo, cuyos jueces inmovilizaron un avión que llevaba inmigrantes a Ruanda esta semana.
Ella dijo: “Tenemos 14 días y apelaremos esto hasta el final, si es necesario ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos”.
La ministra del Interior, Priti Patel, tomó su decisión el viernes, que WikiLeaks dijo que era el “último día” en que podía anunciarse.
Un portavoz del Ministerio del Interior dijo: ‘Según la Ley de Extradición de 2003, el Secretario de Estado debe firmar una orden de extradición si no hay motivos para prohibir que se dicte la orden. Las solicitudes de extradición solo se envían al Ministro del Interior una vez que un juez decide que puede proceder después de considerar varios aspectos del caso.
El 17 de junio, luego de la consideración tanto del Tribunal de Magistrados como del Tribunal Superior, se ordenó la extradición del Sr. Julian Assange a los Estados Unidos. Assange conserva el derecho normal de apelación de 14 días.
“En este caso, los tribunales del Reino Unido no han determinado que extraditar al señor Assange sería opresivo, injusto o un abuso de proceso.
“Tampoco han encontrado que la extradición sería incompatible con sus derechos humanos, incluido su derecho a un juicio justo y a la libertad de expresión, y que mientras esté en los Estados Unidos será tratado adecuadamente, incluso en relación con su salud”.
WikiLeaks dice que apelarán.
Cualquiera en este país que se preocupe por la libertad de expresión debería estar profundamente avergonzado de que el Ministro del Interior haya aprobado la extradición de Julian Assange a Estados Unidos, el país que planeó su asesinato’, dijo la organización en un comunicado publicado en Twitter.
Julián no hizo nada malo. No ha cometido ningún delito y no es un delincuente. Es periodista y editor, y está siendo castigado por hacer su trabajo.
‘Estaba en el poder de Priti Patel hacer lo correcto. En cambio, siempre será recordada como cómplice de Estados Unidos en su agenda para convertir el periodismo de investigación en una empresa criminal”.
WikiLeaks dijo que la decisión “no es el final de la lucha” y lanzará una apelación a través del Tribunal Superior.
Dijo que Assange se enfrenta a un “caso político” en el que hay un intento de “desaparecerlo en los rincones más oscuros de su sistema penitenciario por el resto de su vida para disuadir a otros de pedir cuentas a los gobiernos”.
“No permitiremos que eso suceda”, agrega el comunicado. La libertad de Julian va unida a todas nuestras libertades. Lucharemos para devolver a Julian a su familia y recuperar la libertad de expresión para todos nosotros”.
Los partidarios de Assange, incluido el exlíder laborista Jeremy Corbyn y miembros de Amnistía Internacional, realizaron una protesta frente a la corte antes de la última audiencia de extradición en abril.
Los simpatizantes portaban pancartas con lemas que incluían ‘Liberen a Assange’ y ‘No extraditen a Assange’.
La esposa de Assange, Stella Moris, quien se casó con el fundador de WikiLeaks encarcelado el mes pasado, también estuvo en la audiencia y se sentó en la galería pública.
Pero perdieron el caso.
Agnes Callamard, secretaria general de Amnistía Internacional, dijo sobre la orden de extradición: “Permitir que Julian Assange sea extraditado a Estados Unidos lo pondría en un gran riesgo y enviaría un mensaje escalofriante a los periodistas de todo el mundo.
“Si procede la extradición, a Amnistía Internacional le preocupa enormemente que Assange se enfrente a un alto riesgo de reclusión prolongada en régimen de aislamiento, lo que violaría la prohibición de tortura u otros malos tratos.
“Las garantías diplomáticas proporcionadas por los EE. UU. de que Assange no permanecerá en confinamiento solitario no pueden tomarse al pie de la letra dada la historia anterior.
“Pedimos al Reino Unido que se abstenga de extraditar a Julian Assange, que Estados Unidos retire los cargos y que Assange sea liberado”.
Assange es buscado en Estados Unidos por una supuesta conspiración para obtener y divulgar información de defensa nacional tras la publicación de WikiLeaks de cientos de miles de documentos filtrados relacionados con las guerras de Afganistán e Irak. Siempre ha negado haber actuado mal.
Assange ha estado recluido en la prisión de Belmarsh durante tres años desde que lo sacaron de la embajada ecuatoriana en Londres.
En marzo se le negó el permiso para apelar su extradición a Estados Unidos. Pidió a la Corte Suprema que le permitiera impugnar una decisión de diciembre de 2021 de la Corte Suprema, que dictaminó que podía ser extraditado a Estados Unidos.
Sin embargo, en marzo, la Corte Suprema confirmó que había rechazado la solicitud de apelación de Assange.
El Tribunal Supremo, el tribunal supremo del Reino Unido, denegó su solicitud de impugnar el fallo porque su solicitud no planteó ‘un punto de derecho discutible’.
Después de la audiencia, los abogados de Assange emitieron una declaración y expresaron su preocupación por la confianza del tribunal en la garantía de Estados Unidos con respecto a las condiciones de prisión en las que se mantendría a Assange, en caso de que fuera extraditado.
Assange es buscado en Estados Unidos por una supuesta conspiración para obtener y divulgar información de defensa nacional.
Si es declarado culpable en Estados Unidos, Assange enfrenta una posible pena de hasta 175 años de cárcel, dijeron sus abogados.
Sin embargo, el gobierno estadounidense dijo que era más probable que la sentencia fuera de cuatro a seis años.
Siguió a la publicación de WikiLeaks de cientos de miles de documentos filtrados relacionados con las guerras de Afganistán e Irak.
Él dice que la información expuso los abusos del ejército de los EE. UU., pero los EE. UU. dicen que las filtraciones de material clasificado pusieron en peligro vidas, por lo que EE. UU. buscó su extradición del Reino Unido.
Las autoridades de EE. UU. interpusieron con éxito una impugnación ante el Tribunal Superior contra un fallo de enero de la entonces juez de distrito Vanessa Baraitser de que Assange no debería ser enviado a EE. UU., en el que citó un riesgo real y “opresivo” de suicidio.
La pareja de Assange se casó, la Sra. Moris, en la prisión de Belmarsh el mes pasado.
Moris salió de la cárcel de alta seguridad cogida del brazo de su suegro luciendo un vestido diseñado por Vivienne Westwood.
Conteniendo las lágrimas y vistiendo su vestido de novia, dijo: ‘Estoy muy feliz pero estoy muy triste… Ojalá estuviera aquí… Lo que estamos pasando es inhumano’.
Ella agregó: ‘Él es la persona más increíble del mundo y debería ser libre.
‘Pero nuestro amor nos llevará a través.’.
Assange se casó con Moris, de 38 años, frente a cuatro invitados y dos testigos esta tarde. A la ceremonia asistieron dos funcionarios de prisiones, uno de los cuales actuó como fotógrafo oficial.
Assange y su nueva esposa, la Sra. Moris, anunciaron su compromiso en noviembre del año pasado.
La pareja, que tiene dos hijos juntos, Max, de dos, y Gabriel, de cuatro, se casó con el registrador dentro de la prisión poco después del mediodía.
Fuente: DeilyMails
