José Luis Fermín “El Chamo”, presunto homicida de la odontóloga Lyda Josefina Amell, se comunicaba con esta mediante el celular de su esposa, Celeste Mercedes Pérez Torres, según detalla el expediente acusatorio contra el matador, aunque no especifica las razones que lo motivaron a cometer el hecho.
El expediente indica que la víctima se identificaba como una cliente de El Chamo, razón por la que procedió a entregar de manera voluntaria su teléfono a las autoridades del Ministerio Público.
El documento indica que luego de permanecer varias horas en el área de la mecánica, El Chamo se reunió con la occisa Lyda Josefina Amell Bogaert en la tercera puerta de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y que desde allí se
dirigieron hacia El Malecón donde se detuvieron a conversar.
Según dijo el presunto homicida a las autoridades, la víctima ingirió unas pastillas que utilizaba de forma habitual para dormir, ya que la misma se encontraba medicada Psiquiátricamente. Luego desde allí se dirigieron por el mismo malecón hacia la avenida LasAméricas, donde se detuvieron otro rato y posteriormente retornaron hacia el Distrito Nacional, específicamente a la avenida V Centenario donde este procedió a estrangularla y a dejarla abandonada en el interior de su vehículo.
Esta semana, agentes policiales, adscritos al Departamento de Investigaciones de Homicidios, en coordinación con representantes del Ministerio Público, capturaron a José Luís Fermín Díaz, alias “El Chamo y/o Venezuela”, de 30 años, en el sector Villa Juana, Distrito Nacional con relación a la muerte de la odontóloga Lyda Josefina Amell Bogart.
El Chamo fue ubicado y apresado en la calle Francisco Villa Espesa, del referido sector, en atención a la orden de allanamiento y arresto número 0028-AGOSTO-202, emitida por un juez competente.
De acuerdo al informe de la Policía, el acusado conoció a la fallecida tras haberle brindado servicios de mecánica de vehículos.
Se recuerda que el cadáver de Amell Bogart fue encontrado la noche del pasado 27 de julio dentro de la yipeta Dodge, Durango, blanca, placa G387712, donde fue levantado por personal del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).